Manejo químico de las enfermedades en el cultivo de la soja en el noroeste argentino durante la campaña 2018/2019

VICENTE DE LISI; SEBASTIAN REZNIKOV; MARCELA ESCOBAR; JULIANA BLECKWEDEL; M. PAULA CLAPS; DIEGO MAXIMILIANO CATALDO; MIGUEL ANGEL GONZÁLEZ; CAROLINA MARÍA GÓMEZ FUENTES; EMMINA DE LOURDES LOPÉZ RUIZ; PILAR MEJAIL; VICTORIA GONZÁLEZ; L. DANIEL. PLOPER

Publicación especial EEAOC

EEAOC

Año: 2019

0328-7300

La soja [Glycine max (L.) Merrill] es un cultivo de importancia tanto a nivel nacional como regional. Sin embargo, uno de los factores limitantes más importantes en la producción de granos es el estrés biótico originado por enfermedades, con pérdidas que oscilan entre 10% y 20% a nivel mundial. En Argentina, las pérdidas por las enfermedades de la soja fueron calculadas en alrededor de 900.000 toneladas por año, causando un perjuicio de más de 250 millones de dólares (Wrather et al., 2010).En el control de las enfermedades se utilizan diferentes estrategias que incluyen el uso de cultivares resistentes y semillas certificadas, el tratamiento con fungicidas curasemillas, el uso de prácticas culturales (rotación de cultivos, fechas de siembra, densidad de plantas, etc.), el control biológico y el uso de fungicidas de síntesis química ampliamente difundido en la región NOA para el control de las EFC y la roya asiática (Ploper et al., 2008).Por esta razón se planteó realizar ensayos a campo de fungicidas comerciales que contengan carboxamidas en sus mezclas, con el agregado de un fungicida de múltiples sitios de acción, a fin de aumentar la eficacia de control de las enfermedades presentes y/o proteger las moléculas de los activos utilizados de sitio específico de la selección de resistencia por parte de los patógenos.