CONICET | Buscador de Institutos y Recursos Humanos

Hacia finales del siglo XIX y principios del siglo XX la Argentina proyectó sucesivas políticas de producción, regulación y control social. El objetivo básico de este proceso de cambios y mutaciones era la aparición de una ciudadanía moderna en el contexto formativo de un estado-nación. De este modo, el país empezaba a ser imaginado a través de una trama de representaciones que involucraría a diferentes esferas de la vida social, de la economía y de la cultura. En este texto nos detendremos específicamente en los efectos de los discursos y prácticas de los políticos, criminólogos, jueces y médicos higienistas adjudicaron a las identidades de género y a las prácticas sexuales, y que estuvieron disponibles simbólicamente en la época del lema orden y progreso. La amenaza sistemática que los poderes trazaron contra la integridad del estado-nación estuvo signada, efectivamente, por una serie de pandemias iniciales -plagas reales del último cuarto del siglo XIX- que se proyectaron fantasmáticamente en la metáfora orgánica de una anatomía afectada. Esta cuestión supuso aceleradamente la articulación de una ortopedia social sostenida en discursos de verdad que le daban status científico en un marco de clara expresión positivista

enviar mensaje