PERSONAL DE APOYO
ECHEVARRIA Karina Vanesa
congresos y reuniones científicas
Título:
ASPECTOS GEOMORFOLÓGICOS Y MORFODINÁMICOS QUE CONTROLAN EL PELIGRO DE INUNDACIÓN EN LA CARLOTA, CORDOBA, ARGENTINA
Autor/es:
DEGIOVANNI, SUSANA; DOFFO, NELSO; ECHEVARRIA, KARINA VANESA
Lugar:
San Miguel de Tucumán
Reunión:
Congreso; XX CONGRESO GEOLÓGICO ARGENTINO; 2017
Institución organizadora:
Asociación Geológica Argentina - Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo (Universidad Nacional de Tucumán)
Resumen:
Las inundaciones son procesos naturales, muchas veces perturbados por la acción del hombre, que operan sobre la superficie terrestre en una relación marcada de interdependencia. Según Baker (1994) su estudio está fuertemente basado en modelos hidrológicos/hidráulicos, cuyos resultados se imponen a la sociedad a través de diseños de ingeniería, zonificaciones de peligro de inundación, etc. Por otro lado, la comprensión geomorfológica de las inundaciones surge del estudio de índices/indicadores (morfológicos, sedimentológicos, hidrológicos) de procesos reales actuales o que operaron en el pasado (Baker 1994, Benito y Thorndycraft 2005). La complementariedad entre ambos enfoques permite realizar cartas ambientales de mayor valor predictivo sobre la peligrosidad de inundación de una región, la cual, según Panizza (1993) y Hermelin (1991) debe incluir el estudio de las variables que determinan la susceptibilidad de un área frente a un proceso (natural/inducido) que constituye una amenaza. Aunque estas herramientas deberían ser utilizadas en el ordenamiento y gestión territorial, hay numerosos antecedentes a nivel mundial y nacional, donde las inundaciones causaron cuantiosas pérdidas económicas y de vidas humanas. En Argentina, desde tiempos prehispanos, se registran variadas formas de ocupación permanente de planicies fluviales/aluviales activas, potenciadas en los últimos 70 años, con la construcción de grandes presas. A este escenario se suma la variabilidad climática que se manifiesta desde 1970, con la ocurrencia de eventos extremos, que generan importantes inundaciones en distintas regiones del país (Latrubesse y Brea 2010). Particularmente, en Córdoba, son más frecuentes en las llanuras deprimidas orientales y sudorientales, donde descargan los sistemas superficiales y subterráneos con nacientes en las Sas. Pampeanas y zonas pedemontanas (Carignano et al. 2014). El clima regional es Mesotermal (TMA: 16,5 ºC), Subhúmedo-Húmedo en la zona serrana y pedemontana (PMA: 909 mm) a Subhúmedo-Seco en las planicies orientales (PMA: 861 mm). El río Cuarto (cuenca 2500 km2) nace en la Sa. de Comechingones y desagua en los Bañados del Saladillo, es permanente y presenta un régimen torrencial, el cual pierde intensidad hacia cuenca baja. En este sector, en crecidas superiores a 350 m3/s, se registran/ron procesos de desbordes/inundación que afectan zonas rurales y, recurrentemente, a la ciudad de La Carlota (1780, 1801, 1891, 1897, 1904, 1928, 1934, 1943, 2007, Doffo et al. 2016). El objetivo de este trabajo es analizar los aspectos geomorfológicos y morfodinámicos que controlan la peligrosidad de inundación de esta ciudad, como base para elaborar cartas ambientales predictivas. Utilizando imágenes satelitales Landsat 8 (1991-2015, USGS) y Google Earth, hojas topográficas del IGN (año 1950, Esc.1:50.000), fotografía satelital Corona KH-4B (1972), fotografías históricas, informes oficiales, encuestas a pobladores y la información de campo (morfosedimentológica, procesos activos, hidrometría, obras) se elaboraron mapas geológico-geomorfológicos, morfodinámicos, de escurrimientos superficiales, de morfoisohipsas, que permitieron caracterizar la susceptibilidad de inundación del área. Para evaluar la amenaza, se estimó la capacidad del canal/faja fluvial para conducir caudales superiores a los 350 m3/s, a través del análisis (gabinete y campo) y cartografía de variables de alta incidencia en la dinámica/hidráulica del flujo, como la sinuosidad (s) y sección transversal (h=altura barrancas, a=ancho canal). Así, se zonificó la faja fluvial según su potencialidad de desbordes, definiendo los sitios más probables de ingreso de agua a la ciudad. Se elaboraron cartas de peligrosidad frente a tres escenarios diferentes de amenaza (ocurrencia de desbordes aguas arriba, en y aguas abajo de La Carlota). El área de estudio (33º20?57??S y 33º28?19??S - 63º28?24??O y 63º11?50??O) integra el paleoabanico aluvial del río Cuarto, el cual conforma un mosaico compuesto por paleofajas fluviales de orientación OE, NO-SE y SO-NE, cubiertas y/o modificadas por deflación y acumulación eólica durante el Pleistoceno tardío-Holoceno (Carignano et al. 2014). Particularmente, en el ejido urbano/periurbano de La Carlota (LC) el relieve es suavemente ondulado (146-137m s.n.m) y la pendiente general es del 0,11%, hacia el E-SE. Las paleofajas fluviales tienen muy bajo gradiente (aprox. 0,01%), un ancho superior a los 2 km, y presentan paleocanales discontinuos, lagunas efímeras y playas salinas. En general dominan secuencias arenosas finas-muy finas (depósitos de canal, desbordes, dunas) y limo-arcillosas con abundante materia orgánica (niveles palustres, paleosuelos). Están separadas por lomadas planas de hasta 3 km de ancho ligeramente más elevadas (3-5 m) donde afloran materiales eólicos arenosos finos del Holoceno superior. La faja fluvial actual del río Cuarto en su tramo inferior, está incidida en el paleoabanico aluvial, en general es angosta y presenta un reducido nivel de terraza. El canal tiene una pendiente general muy baja (0,10%), presenta tramos meándricos (s: 1,38-1,56) y otros muy rectos (s: 1,1-1,24) y su ancho varía desde 50 a 16 m. Es un canal de carga mixta, que transporta arenas medias a finas por el fondo y arenas muy finas/limos en suspensión. En las últimas décadas, el canal muestra mínima migración lateral, aunque su sección transversal evidencia procesos de acreción vertical en lecho y márgenes. Desde aproximadamente 7 km aguas arriba de La Carlota, son comunes los desbordes en crecidas de magnitud, que dejan depósitos arenosos finos/muy finos de espesor variable entre 0,025 y 0,50 m. Como es característico para estas posiciones de cuenca el río Cuarto circula sobreelevado respecto de la llanura aluvial circundante. Las orientaciones de los escurrimientos efímeros (pluviales/desbordes) son divergentes y están controladas por las antiguas fajas fluviales separadas por divisorias secundarias (lomadas planas) que se disipan hacia las depresiones orientales. Este patrón típico de áreas de descarga hidrológica (flujo distributario/sedimentación) está parcialmente modificado tanto en el tramo inferior del río/Bañados del Saladillo, como en el área urbana y periurbana de La Carlota, por diferentes obras (albardones, canales, red ferroviaria, trazado de calles, desagües pluviales y piletas de aquietamiento). Del análisis geoambiental surge que: 1-la mayor parte del área posee susceptibilidad moderadamente alta a alta, coincidente con las paleofajas fluviales y planicies orientales, donde se concentran y/o almacenan mayores volúmenes de agua. Esta situación está potenciada por obras que obstruyen y/o endican el flujo de agua (FFCC, desagües, puentes, etc.). La clase moderada incluye los flancos de las lomadas que actúan localmente como divisorias y, por sus alturas intermedias, se inundan temporariamente ya que el agua circula rápidamente. Las zonas de susceptibilidad baja (menor expresión areal) corresponden a las crestas de las lomadas planas con cotas superiores a 143,5 m.snm. 2- en la faja fluvial domina la clase moderada (ag. abajo LC) a moderadamente alta (aguas arriba LC) de susceptibilidad de desborde (ej. ausencia albardón- h barrancas < 4m - s >1,4- a > 50 m) y, en menor porcentaje (en y aguas abajo LC) la clase moderadamente baja (segmentos cortos donde h barrancas > 4m - a > 30 m ? s