Identificación y perfil de sensibilidad de levaduras aisladas de hemocultivos y catéteres de pacientes pediátricos hospitalizados

GIUSIANO G; SOSA MA; ROJAS F; MANGIATERRA M; TOMA VANACORE S; JARA S

Córdoba, Argentina

Congreso; XI Congreso Argentino de Microbiología; 2007

En los últimos años se ha observado un significativo aumento de las infecciones por hongos levaduriformes en pacientes hospitalizados, siendo la funguemia un problema cada vez mas frecuente, particularmente entre pacientes pediátricos. Importantes cambios se han producido en la epidemiología de la candidiasis, entre ellos, una disminución en la frecuencia de candidemias producidas por Cándida albicans (C. albicans) y un incremento de las Cándidas no albicans. Por otra parte se ha detectado una resistencia emergente a los antifúngicos (ATF). El uso indiscriminado de drogas azólicas, como el fluconazol (FCZ), ha permitido la selección de especies con resistencia intrínseca o secundaria a este ATF. Es importante destacar el aislamiento de cepas resistentes o con alta CIM en neonatos, pacientes que por su corta vida, no han recibido terapia antifúngica previa. También es importante la detección de  cepas de C. albicans resistente o con sensibilidad disminuida a los azolicos, especie históricamente considerada con alta sensibilidad. Dado que el FCZ y la AMB son las escasas opciones terapéuticas para estos pacientes, preocupa el hallazgo de especies con resistencia primaria o secundaria al FCZ (C. krusei y C. glabrata), y de especies como Trichosporon, C.lusitaniae y R..glutinis, considerados preocupantes patógenos emergentes por su resistencia a la AMB. C. krusei demostró su resistencia intrínseca al FCZ y la capacidad de desarrollo de resistencia cruzada al ITZ. El aislamiento de Malassezia acentúa la necesidad de introducir la metodología específica para su detección, que de otra manera sería subdiagnosticado. Se observa un cambio en el papel predominante frecuentemente asignado a C. albicans como agente de infecciones fúngicas nosocomiales en niños con un alto porcentaje de especies no C. albicans, hoy todas consideradas con capacidad de desarrollar resistencia secundaria al FCZ. La diversidad y los perfiles de sensibilidad observados enfatizan la importancia del estudio de los factores de riesgo junto con la tipificación y el antifungigrama, para desarrollar una estrategia preventiva y/o terapéutica eficaz. Es importante destacar el aislamiento de cepas resistentes o con alta CIM en neonatos, pacientes que por su corta vida, no han recibido terapia antifúngica previa. También es importante la detección de  cepas de C. albicans resistente o con sensibilidad disminuida a los azolicos, especie históricamente considerada con alta sensibilidad. Dado que el FCZ y la AMB son las escasas opciones terapéuticas para estos pacientes, preocupa el hallazgo de especies con resistencia primaria o secundaria al FCZ (C. krusei y C. glabrata), y de especies como Trichosporon, C.lusitaniae y R..glutinis, considerados preocupantes patógenos emergentes por su resistencia a la AMB. C. krusei demostró su resistencia intrínseca al FCZ y la capacidad de desarrollo de resistencia cruzada al ITZ. El aislamiento de Malassezia acentúa la necesidad de introducir la metodología específica para su detección, que de otra manera sería subdiagnosticado. Se observa un cambio en el papel predominante frecuentemente asignado a C. albicans como agente de infecciones fúngicas nosocomiales en niños con un alto porcentaje de especies no C. albicans, hoy todas consideradas con capacidad de desarrollar resistencia secundaria al FCZ. La diversidad y los perfiles de sensibilidad observados enfatizan la importancia del estudio de los factores de riesgo junto con la tipificación y el antifungigrama, para desarrollar una estrategia preventiva y/o terapéutica eficaz.