El Círculo de Obreros católicos de Santa Lucía en sus años iniciales (Barracas, Ciudad de Buenos Aires)

LUDMILA SCHEINKMAN; SABRINA E. ASQUINI

Mar del Plata

Jornada; X Jornadas de Investigadores en Historia; 2014

Centro de Estudios Históricos ? Departamento de Historia, Facultad de Humanidades, Universidad Nacional de Mar del Plata

El primero de abril de 1894 se fundaba en Barracas el segundo Círculo de Obreros, anidado en la parroquia de Santa Lucía. Dos años antes, en 1892, el Padre Federico Grote había creado el Círculo Central, en sintonía con la Encíclica de León XIII conocida como Rerum Novarum (1892), dando inicio a uno de los mayores exponentes del catolicismo social argentino. La misión de estos centros era morigerar el impacto de la ?cuestión social? entre los trabajadores a través de una vigorosa acción de carácter mutualista, en pos de contener el desarrollos de las ?ideologías disolventes de la moral cristiana?. Para ello, se abocaron a difundir el ideario católico y de colaboración de clases entre los trabajadores. La elección de Santa Lucía como sede del segundo círculo no fue en ningún modo casual. El barrio de Barracas, gran núcleo obrero de la Capital desde fines del siglo XIX, era un destino ineludible para cualquier organización que buscara intervenir sobre los trabajadores y el movimiento obrero. Así como socialistas y anarquistas tuvieron locales y espacios sociales en la zona, también las asociaciones de la caridad cristiana. El objetivo de este trabajo es reconstruir dicha experiencia durante sus primeras décadas. Abordaremos su desarrollo organizativo y territorial, su labor de tipo mutual (consultorios médicos, cajas de ahorro, cooperativas de consumo, agencia de colocaciones, servicios fúnebres, etc), su acción educativa, y su intervención sobre el mundo obrero. Para ello, emplearemos materiales de la misma institución, periódicos del universo católico y prensa de izquierda y comercial.