PERSONAL DE APOYO
GABRIELLI Magali
capítulos de libros
Título:
Chaetophractus villosus | large hairy armadillo, peludo
Autor/es:
POLJAK SEBASTÍAN; GABRIELLI MAGALI; SANCHEZ JULIETA; LIZARRALDE MARTA S.
Libro:
Mamíferos Introducidos Invasores de Argentina
Editorial:
SAREM
Referencias:
Lugar: Mendoza; Año: 2023; p. 265 - 271
Resumen:
Chaetophractus villosus o «peludo» (Xenarthra–Chlamyphoridae) es una especie de armadillo cuya distribución se extiende desde el Gran Chaco de Bolivia y Paraguay hasta el sur de la provincia argentina de Santa Cruz y las provincias chilenas de Bío Bío y Magallanes. Presenta hábitos cavadores, es omnívoro generalista y puede ocupar una gran variedad de ambientes: pastizales, sabanas, bosques e incluso campos degradados por la actividad agropecuaria. Es una especie claramente favorecida por la actividad del hombre dado que puede aprovechar ambientes modificados, alimentarse de ganado y en basurales, y ha ampliado su distribución hacia el sur gracias a ello y a los puentes sobre los ríos. Es la especie más ampliamente distribuida en Argentina; en tiempos recientes ha ocupado toda la Patagonia y en 1982 fue introducida en la Isla Grande de Tierra del Fuego, en la zona de la Bahía San Sebastián, cruzando así el Estrecho de Magallanes. Estudios genéticos determinaron que todos los individuos de esta única ola de colonización pertenecen al mismo linaje mitocondrial, es decir que poseen una gran reducción de la variabilidad genética en la población. Sin embargo su viabilidad y éxito son innegables. Para 2005 la especie ocupaba unos 484 km² en una zona de explotación petrolera en la costa de la mencionada bahía, con tuberías calientes soterradas para el transporte de los hidrocarburos extraídos (una ventaja dado el clima fueguino y los hábitos cavadores del peludo). Actualmente ocupa una superficie aproximada de 8000 km² que incluye grandes zonas sin tuberías calientes, lo que evidencia su definitiva aclimatación a las condiciones de la región. C. villosus no posee depredadores conocidos en Tierra del Fuego y se presume que su presencia allí podría tener impacto sobre varias especies nativas de roedores, aves y el único reptil. Esto tiene sentido dado que en su distribución continental preda sobre anfibios, reptiles, y pichones y huevos de aves, por la distribución que presenta en la Isla Grande y por evidencias indirectas de sus hábitos de forrajeo en el suelo y uso de hábitat en dicha isla. Aunque el peludo C. villosus debe ser considerado una especie exótica establecida en Tierra del Fuego, es necesario realizar estudios dirigidos a evaluar su impacto ecológico y económico en el delicado ambiente insular fueguino.