La relación entre lo nacional y lo internacional en la coyuntura latinoamericana actual

VARESI, GASTÓN ÁNGEL

Tigre

Taller; III Taller Escuela Latinoamericano y Caribeño de Estudios Gramscianos; 2024

Red Latinoamericana y Caribeña de Estudios Gramscianos

El objetivo de esta presentación es analizar el vínculo entre lo internacional y lo nacional en nuestro siglo XXI, partiendo del contexto latinoamericano, proponiendo una periodización que nos permita indagar esa articulación de escalas, tomando luego ejemplos del caso de Argentina. Para ello recuperaremos dos ejes claves del pensamiento gramsciano: los conceptos de hegemonía y de relaciones de fuerza. Hegemonía entendida como la dirección política, ideológica y cultural de un grupo social sobre otros, la cual expresa una capacidad de conducción que implica un predominio de los componentes del consenso sobre los componentes coercitivos de la acción política. Y para ello requiere de la participación de los grupos dirigidos en la visión del mundo del grupo dirigente, constituyendo a la batalla de ideas en una dimensión destacada. Además, para que una hegemonía logre incidir a nivel del Estado, es necesaria la formulación de un proyecto particular que tienda a sintetizar una unidad de fines políticos, económicos, intelectuales y morales, pero que se presente sobre un plano universal, como el “desarrollo de todas las energías “nacionales”” (Gramsci, 2003:58).La construcción de hegemonía involucra toda una guerra de posiciones, una lucha en las múltiples trincheras donde se produce y reproduce el orden social, atravesando los distintos momentos de las relaciones de fuerza. Estas relaciones de fuerza son la forma compleja que tiene Gramsci de percibir al poder, como un vínculo que es asimétrico y puede cristalizarse por momentos pero que está siempre en disputa y es cambiante a lo largo del tiempo. Es en el análisis de situaciones gramsciano donde podemos encontrar algunos insumos para pensar la relación entre lo internacional y la nacional, porque es una perspectiva que involucra un análisis en múltiples dimensiones y en múltiples escalas. Gramsci sugiere comenzar por las relaciones de fuerzas internacionales, las cuáles conllevan un doble camino: por un lado, analizar la conformación de las potencias y bloques de Estados hegemónicos y su relación con las potencias y bloques menores, lo cual nos abre un espacio de reflexión sobre las dinámicas del imperialismo, las luchas por la soberanía y los procesos de integración, y, por otro lado, observar su vínculo con las principales características y tendencias del modo de producción dominante. Asimismo, las relaciones de fuerza contienen tres dimensiones claves, susceptibles de ser analizadas tanto en el plano internacional como nacional, las cuales refieren a las relaciones de fuerzas sociales, como poder de carácter socio-económico que parte de la estructura según la posición y función que los grupos sociales ocupan en el proceso productivo y su capacidad de incidir en el mismo, las relaciones de fuerzas políticas, que van desde las luchas económico-corporativas hasta llegar a las grandes disputas por proyectos de sociedad y la construcción de hegemonía a nivel del Estado, y, por último, las relaciones de fuerzas militares, que como advierte Gramsci, suelen ser decisivas una vez que se ponen en juego. Desde estas coordenadas conceptuales, nos proponemos periodizar y caracterizar algunos aspectos fundantes del siglo XXI latinoamericano.