INVESTIGADORES
LESCANO Marina Aurora
congresos y reuniones científicas
Título:
LOS NANOFÓSILES CALCÁREOS EN LA DATACIÓN DE SEDIMENTITAS MARINAS CRETÁCICAS DE LA CUENCA NEUQUINA
Autor/es:
LESCANO, M.; CONCHEYRO, A.
Lugar:
Neuquén
Reunión:
Congreso; XVIII Congreso Geológico Argentino; 2011
Resumen:
Los nanofósiles calcáreos han demostrado su utilidad en los estudios bioestratigráficos permitiendo precisar la edad de las secuencias marinas mesozoicas. Durante el Cretácico, sus asociaciones han tenido, en general, una distribución mundial, con numerosas especies cosmopolitas y otras más endémicas, las que varían en función de la latitud y la situación paleogeográfica. En Argentina se han llevado a cabo numerosos estudios sobre los nanofósiles calcáreos con el objetivo de establecer correlaciones estratigráficas en la Cuenca Neuquina (Figura 1) y con otras cuencas mesozoicas australes (cuencas Austral, Malvinas y James Ross). En la Cuenca Neuquina se han reconocido diferentes asociaciones de nanofósiles calcáreos asignadas al Cretácico Inferior y Superior. El límite Tithoniano -Berriasiano ha sido registrado en sedimentitas de la Formación Vaca Muerta en Loncoche, Rahue y Tres Esquinas, situadas al sur de la Provincia de Mendoza (Lescano y Kietzmann, en prensa) y en 18 perforaciones de la provincia de Neuquén (Concheyro, 2007). La nanoflora berriasiana se compone principalmente por especies de los géneros Watznaueria y Micrantholithus, en cambio el género Eiffellithus únicamente está representado por E. primus.La riqueza específica es muy baja y dicha asociación se correlaciona con la zona NJK . En muestras provenientes de las formaciones Vaca Muerta y Mulichinco, en la localidad de Puerta Curacó, se ha reconocido una asociación asignada al Valanginiano Inferior que se caracteriza por el predominio del género Watznaueria, y los registros de los géneros Zeugrhabdotus y Nannoconus, incrementándose la riqueza específica. La aparición de E. windii caracteriza a las asociaciones asignadas a esta edad y permite su correlación con la zona estándar definida con nanofósiles calcáreos CC3 (Bown y Concheyro, 2004). Para el intervalo Valanginiano-Barremiano Temprano, se han reconocido asociaciones de nanoflora en sedimentitas de la Formación Agrio. El Valanginiano Superior ?Hauteriviano Inferior se caracteriza por nanofósiles con una alta riqueza específica y se destacan los géneros: Nannoconus (15 sp.), Zeughrabdotus (8 sp.), Watznaueria (5 sp.), Retecapsa (4 sp.). El registro de E. windii junto con E. striatus caracteriza las nanofloras asignadas al Valanginiano Tardío, y el registro de E. striatus junto con Clepsitlithus maculosus, a las del Hauteriviano Temprano. Para el Hauteriviano Tardío las asociaciones de nanofósiles registradas en el Miembro Agua de la Mula contienen los mismos géneros que en el Miembro Pilmatué pero se diferencian por un incremento en la riqueza específica. La presencia de Lithraphidites bolli y Nannoconus ligius permite la correlación con las zonas standard CC4 y CC5 del Hauteriviano Tardío- Barremiano Temprano (Concheyro y Sagasti, 1999; Bown y Concheyro, 2004; Rodríguez y Concheyro, 2005; Ballent et al., 2006, Concheyro et al., 2006; Lescano et al., 2006; Lescano y Concheyro, 2009). Desde el Barremiano al Maastrichtiano no se reconocen asociaciones de nanofósiles calcáreos en la Cuenca Neuquina ya que predominan los ambientes francamente continentales, hasta que se registra una nueva ingresión, de origen atlántico. Los nanofósiles calcáreos del Maastrichtiano Superior han sido reconocidos en nueve localidades, en las provincias de La Pampa, Río Negro, Neuquén y Mendoza y un sondeo Allén, próximo a la localidad de Allen, provincia de Río Negro (Concheyro, 1995; Náñez y Concheyro, 1996; Concheyro et al., 2002; Tunik et al., 2004 y del Río et al, en prensa). La nanoflora recuperada constituye una verdadera creta, en ciertos niveles resulta muy abundante y posee una muy elevada riqueza específica. La preservación de los ejemplares es excelente. Hacia el norte de la cuenca la riqueza específica y abundancia de la nanoflora disminuyen abruptamente. Con una elevada riqueza específica se destacan los géneros Cretarhabdus (4 sp.), Micula (4 sp.), Eiffellithus (3 sp.), Arkangelskiella (3 sp.), Biscutum y subordinadamente Prediscosphaera, Gartnerago, Chiastozygus. El registro de Nephrolithusfrequens, conjuntamente con el de Cribrosphaerella daniae permite asignar la nanoflora al Maastrichtiano Tardío, zona CC26. En los nanofósiles calcáreos del Cretácico Inferior se advierte una marcada afinidad tetiana, que se destaca por la presencia del género Nannoconus. Éste permite señalar una dirección de dispersión desde el Tetis hacia el Océano Pacífico a través del corredor caribeano. En cambio, para las asociaciones de nanofósiles del Cretácico Superior, las presencias de Biscutum, Nephrolithus, Kamptnerius, indican una fuerte dispersión de la nanoflora desde regiones de altas latitudes hasta latitudes medias, atravesando la plataforma argentina y colonizando el mar restringido que cubría la región del Engolfamiento Neuquino a fin del Cretácico.