Mecanismo, organismo, maquinismo. La noción de sistema en las filosofías de Spinoza, Bergson y Deleuze

AXEL CHERNIAVSKY

Bariloche, Argentina

Congreso; IX Coloquio Internacional Bariloche de Filosofía; 2008

En una entrevista aparecida el 23 de octubre de 1980 en Libération, Deleuze le asegura a Robert Maggiore que ?los sistemas no perdieron estrictamente nada de sus fuerzas vivas?. Es una declaración intrigante para quien fue considerado con frecuencia, al igual que sus fuentes, como Nietzsche o Bergson, un pensador asistemático. Lo que sucede es que la sistematicidad o asistematicidad de una obra depende del concepto de sistema con el que se la evalúe. Operará éste como un criterio más o menos flexible que incluirá y excluirá a las distintas filosofías. ¿La filosofía de Deleuze y las de los filósofos de los cuales se inspira se ordenan sistemáticamente? ¿Cuál es el concepto de sistema en juego? ¿Abarca o margina a sus propias filosofías? Una presentación de la noción de sistema en Deleuze que recurra además a dos de sus fuentes mayores, Spinoza y Bergson ?para tomar una obra unívocamente sistemática y otra crítica del concepto de sistema?, mostrará que en cada caso el sistema en juego adopta una configuración diferente. A un mecanismo va a corresponder un sistema deductivo; a un vitalismo, un sistema orgánico; a un maquinismo, un sistema rizomático. En cada caso, la noción metafilosófica de sistema se revelará en una cierta ?coherencia? con las concepciones del método y con la práctica del discurso filosófico. Y en cada caso, estas tres esferas (metafilosofía, filosofía del método y discurso filosófico), se mostrarán dependientes de la concepción del ser. Por eso, a través de las mutaciones de la noción de sistema, en esta tradición vitalista que reconstruye Deleuze, aparecerá una constante: la preeminencia lógica de la ontología.