INVESTIGADORES
ITHURALDE Raul Esteban
libros
Título:
Memorias de los Orígenes de la Central Campesina de Pinto. Primera Reimpresión
Autor/es:
MOCASE-VC; APORTARON: ; BEATRIZ GUALDIERI; MARÍA JOSÉ VÁZQUEZ; LUCÍA KAMIENKOWSKI; MARCELO OTERO; FABIÁN FERREIRA; VERÓNICA HENDEL; JAVIER DI MATTEO; LEANDRO PANKONIN; LETICIA WAINSCHENKER; NORMA MICHI; DIANA VILA; JUAN MASCARÓ; PATRICIA DURAND; ESTEBAN ITHURALDE; GISEL CABADO; SANYÚ; JULIÁN SOTELO; JUAN PABLO RODRÍGUEZ; CORALIA VIGNAU
Editorial:
Editorial de la Universidad Nacional de Luján // MoCASE-VC
Referencias:
Lugar: Luján; Año: 2018
ISSN:
978-987-25607-0-6
Resumen:
Dictámenes de los Evaluadores:Evaluación 1:El trabajo permite visualizar una forma particular de producción de conocimiento, construida por sujetos diversos en y desde un ámbito específico: el accionar de un movimiento social (MOCASE-VC) en territorios rurales en disputa, siendo de especial relevancia la participación de los sujetos protagonistas de esos procesos en los diversos momentos de la producción y evaluación del libro. Se destaca la riqueza de fuentes de información (ver descripción en punto 3), entre las cuales resultan de gran originalidad los registros de hechos, conflictos y reuniones organizativas en cuadernos producidos por l@s campesin@s. Ofrece claves y sugerencias metodológicas que no se restringen al proceso de producción del texto-libro, sino que refieren a instancias novedosas de circulación del mismo entre agentes generalmente no considerados por la crítica académica y/o literaria. Durante el tiempo transcurrido entre la primera edición de este libro y la posibilidad actual de reedición por parte de la EdUNLU, el equipo multidisciplinario responsable de su producción (Grupo Memoria histórica del MOCASE-VC, en adelante GMH) ha acumulado experiencias y saberes en torno al Libro y su significado, que son incluidas en esta nueva versión. En la ?Introducción a la segunda edición? se describe la realización del ?taller de devolución y evaluación del libro?, instancia que el GMH impulsó con el fin de conocer la repercusión del mismo en las comunidades rurales donde está organizado el Movimiento. Se destaca aquí el trabajo con escuelas públicas (en las que dicho libro ha sido incorporado como material de trabajo) y otras actividades que hablan de la consideración de las familias campesinas y del MOCASE-VC como portador@s de saberes e historias que la escuela pública comienza a valorar e incorporar. Esta iniciativa habla de la potencialidad de la producción de conocimiento realizada en forma conjunta entre equipos universitarios y Movimientos sociales y su articulación con la Educación pública estatal. Como se desprende de las memorias de l@s niñ@s y jóvenes miembros del Movimiento (Apartado ?La Memoria de los más jóvenes?, p. 149), en la historia reciente de Santiago del Estero no se trata de un hecho menor. Por el contrario, puede ser considerado un precedente importante en tanto muestra señales de transformación de algunos aspectos excluyentes que caracterizarían la realidad socioeducativa de la zona: nos referimos particularmente a la estigmatización de las experiencias de organización colectiva por la defensa de la tierra y la forma de vida campesina (como lo es el MOCASE-VC) y la negación de dicha identidad en el aula por parte de l@s maestros/as. Con diversos énfasis según los apartados (pues no está organizado por capítulos), la lectura global del libro permite identificar las estructuras y procesos sociales que han configurado los territorios rurales durante las últimas cuatro décadas, las disputas que lo atraviesan, las vivencias subjetivas de sus pobladores en torno a dichos procesos, así como las estrategias de acción individuales y colectivas que fueron ensayando hasta dar nacimiento al proceso organizativo que hoy los contiene (su participación en el MOCASE-VC, a través de la creación de la Central de Pintos) y con el que han logrado defender la forma de producción campesina. Esta experiencia constituye un testimonio de resistencia, cuya vigencia se acentúa en el actual contexto sociopolítico, donde se profundiza el amparo institucional al modelo agrario dominante, basado en la contaminación, destrucción y la expropiación de los bienes comunes a las comunidades campesinas e indígenas. La estrategia teórico-metodológica adoptada enfatiza la voz de los sujetos protagonistas, sus experiencias previas y posteriores a la incorporación al Movimiento social. Se advierte coherencia entre dicha estrategia y el relato resultante, en el que se destaca la diversidad de fuentes/voces utilizadas. Si bien puede advertirse una predominancia de las fuentes testimoniales (entrevistas individuales y colectivas producidas en distintos años por el GMH), se ponen en juego fuentes iconográficas (mapas y fotos de la vida en el campo y del proceso organizativo) y una amplia variedad de fuentes documentales entre las cuales, como ya adelantamos, se destacan por su originalidad los registros de hechos, conflictos y reuniones organizativas en cuadernos producidos por l@s campesin@s; expedientes judiciales, artículos periodísticos, cartas, proyectos de ley y documentos producidos por la organización social en sus primeros tiempos (folletos, calendarios, cartillas). Sin embargo, esta amplia diversidad de fuentes no se contempla al final del libro, cuando se mencionan las fuentes citadas (p. 173). Las intervenciones del Grupo Memoria Histórica (GMH) se hace presente en breves relatos que acompañan y articulan las fuentes mencionadas. Dicha intervención ofrece información y datos de diversa índole; pero fundamentalmente sistematiza sentidos, ofreciendo una lectura de procesos que permiten dimensionar social e históricamente los acontecimientos que se narran desde el territorio de Pintos en la Provincia de Santiago del Estero a través de los testimonios de campesin@s. A su vez, las iniciativas/dispositivos mencionados en la Introducción y en las ?Notas para una introducción metodológica? como las reuniones y talleres de ?devolución y evaluación? primero de la versión borrador y posteriormente del libro impreso, ilustran la concepción que orienta las acciones del GMH y del MOCASE-VC en su conjunto, en la que es central la participación de l@s campesin@s en la toma de decisiones y en la producción de significado sobre aspectos sustanciales de este proyecto de reconstrucción de la memoria histórica y de su experiencia organizativa en general. El libro en su conjunto permite visualizar una forma de trabajo de co-producción de conocimientos entre estudiantes universitarios, graduados de distintas disciplinas y miembros de una organización social. En esta última, se produce un conocimiento específicamente orientado desde y hacia la praxis colectiva del MS (MOCASE-VC) pero lo trasciende, ya que dicho conocimiento ha venido contribuyendo de múltiples maneras con debates más generales sobre la función social de la universidad. La forma de conocimiento que sintetiza este libro y otras producciones realizadas desde y con el MOCASE-VC, ofrece elementos que pueden orientar la elaboración de políticas educativas, especialmente en el ámbito de la extensión universitaria, de la Educación de Jóvenes y Adultos, de la Historia y de las disciplinas que abordan específicamente las problemáticas territoriales y rurales (Agronomía, Geografía, Sociología, entre otras). En el apartado ?Notas para una introducción metodológica? se recogen las preguntas (p.15), debates (p.12) y principales decisiones (p.14) que orientaron la forma de trabajo de GMH. Consideramos que los mismos constituyen problematizaciones y lineamientos significativos que pueden ser tenidos en cuenta en trabajos de diversa índole a realizar entre equipos de docencia, investigación y extensión universitaria junto a organizaciones y Movimientos sociales. Modificaciones sugeridas:La riqueza de fuentes, cuyo detalle mencionamos en el punto 3, no se encuentra reflejada al final del libro, cuando se mencionan las fuentes citadas (p. 173), en las que sólo se incluye a los periódicos. A modo de sugerencia, podría incorporarse la gran diversidad de fuentes utilizadas. Las entrevistas, cuadernos y otros documentos de la organización, constituyen aportes sustantivos que hablan de la concepción que orienta el trabajo realizado. Enfatizamos que se trata de una sugerencia, que puede o no ser tenida en cuenta por los autores.Evaluación 2:La originalidad del libro se basa en dos aspectos. El primero se relaciona con el objeto del libro que rescata la memoria histórica de una de las centrales campesinas del MOCASE-VC, movimiento social significativo y relevante en los últimos años en la Argentina. Particularmente interesante resulta la apuesta por un abordaje territorializado que se traduce en un trabajo de recopilación, aproximación y presentación de un relatar y un recuperar situado de la memoria histórica. En este sentido, el acceso a las experiencias y las voces de quienes integran el MOCASE-VC se concreta por intermedio de los campesinos y las campesinas de la central de Pinto; así se cuenta la historia del movimiento desde la especificidad de sus territorios de lucha. Asimismo, cabe destacar el valor del ejercicio de registro y sistematización, revirtiendo un problema que, a menudo, las organizaciones y movimientos populares identifican como déficit de sistematización. El segundo aspecto original del material reside en su metodología. Tal como el mismo libro sostiene en la introducción a su segunda edición, se sigue una metodología que le otorga ?un papel central a las voces y experiencias, aquellas que emergen en los espacios de intercambio?. Por lo tanto, la recuperación de la memoria histórica se realiza no desde los términos de un análisis estrictamente académico sino desde los relatos de los campesinos y las campesinas, dotando de valor a las voces de los protagonistas de los diversos acontecimientos, estrategias organizativas y luchas que dieron lugar a la central de Pinto desde su origen hasta su consolidación. De allí que este libro sea un aporte en su calidad de muestra en acto de la categoría teórica que nombra a los ?movimientos populares como intelectuales colectivos? en su condición de productores de conocimiento y contadores de su memoria histórica.Por el particular enfoque de la memoria histórica, el material de la primera edición que se conserva en esta nueva edición continúa siendo de absoluta actualidad en tanto relata ?las diversas experiencias que llevaron a juntarse hasta el momento en que la central estuviera consolidada, madura?. Más aún, la reedición y actualización del libro resulta pertinente considerando la modificación del contexto histórico en el cual se realizó la recopilación de las voces y experiencias que dieron lugar a la primera edición. Como se afirma en la Introducción a la Segunda Edición, es ?una coyuntura marcada por el retroceso de las políticas públicas orientadas al desarrollo de la producción campesina-indígena? el carácter netamente neoliberal del gobierno actual (que) ha vuelto a sentar a los grupos hegemónicos del agro en los sillones del Ministerio?. Si se considera a la memoria histórica como un proceso en constante recreación, el nuevo contexto permite abordarla y reinterpretarla desde nuevas perspectivas. Por lo tanto, esta reactualización es coherente con el tratamiento de la memoria histórica que se realiza en el libro. Asimismo, esta segunda edición cuenta con las reflexiones surgidas del taller de devolución y evaluación de la primera edición del libro realizado en el año 2013 reafirmando la coherencia con la lógica metodológica propuesta. Se encuentra en el trabajo una coherencia entre los objetivos propuestos, la metodología utilizada y los desarrollos presentados. Tal como se plantea en la Introducción a la segunda edición, el objetivo general del libro consiste en ?escribir cómo se fue construyendo el Movimiento, hacer memoria y dejarla registrada para que entre todos se vaya recordando, para que otros compañeros puedan conocerla? y, adicionalmente, ?contagiar y hacer visibles formas de lucha, de construcción de saberes y de organización colectiva?. Estos objetivos se concretizan a partir de una metodología que, como se desarrolló en el punto 1 referido a la originalidad, otorga un papel central a las voces de los y las protagonistas de la central de Pinto que se despliegan in extenso sin posteriores interpretaciones o cierres de sentido por parte del Grupo de Memoria Histórica del MOCASE-VC. La presentación de estos testimonios responde a un ordenamiento cronológico antecedido por una contextualización del movimiento y de la central que pone al lector/a a conocer el ámbito en el que se desarrolla la actividad política, productiva y cotidiana de los campesinos y las campesinas cuyas voces son recuperadas. En este sentido, el modo de presentación de los testimonios es coherente con la lógica metodológica planteada en las Notas para una introducción metodológica. Los aportes del libro se consideran de enorme valor para el campo disciplinar relativo al estudio de los movimientos sociales en general y los movimientos campesinos en particular. Por lo tanto, este libro entra en diálogo con el corpus de estudios e investigaciones que tematizan cuestiones y problemáticas referidas a las formas de lucha, organización y resistencias populares, los saberes populares, las historias de vida de los campesinos y campesinas (historias laborales, de migraciones, entre otras). Asimismo, en línea con lo establecido en los puntos anteriores del dictamen, este trabajo resulta un aporte metodológico para el campo disciplinar en tanto se presenta una lógica metodológica que desafía los cánones hegemónicos de la producción de conocimiento en las Ciencias Sociales y Humanas en cuanto al rol en el que se colocan los investigadores e investigadoras y en la valoración de saberes no académicos. En relación específicamente con el área relativa a movimientos sociales y educación, el libro interpela e interroga las prácticas y los debates pedagógicos actuales. Si bien no es su objeto indagar en los espacios-momentos intencionalmente formativos, de su lectura se extrae una concepción de la formación en sentido amplio (en la lucha, en la organización, en las asambleas, en la resistencia a los desalojos); y además, la recuperación de la memoria histórica admite su lectura como una práctica político-pedagógica de alta densidad.