INVESTIGADORES
ITHURALDE Raul Esteban
libros
Título:
Memoria de los Orígenes de la Central Campesina de Pequeños Productores Ashpa Sumaj
Autor/es:
ASHPA SUMAJ:; JUAN PABLO RODRÍGUEZ; MARCELO OTERO; JAVIER DI MATTEO; VERÓNICA HENDEL; VERÓNICA GELMAN; LEANDRO PANKONIN; LETICIA WAINSCHENKER; SANYÚ; DEOLINDA CARRIZO; NORMA MICHI; BEATRIZ GUALDIERI; MARÍA JOSÉ VÁZQUEZ; FABIÁN FERREIRA; MARTÍN FERNÁNDEZ; LUCÍA KAMIENKOWSKI; ESTEBAN ITHURALDE; JUAN MASCARÓ; TONI ROSSELL; XAVIER ÁLVAREZ
Editorial:
MoCaSE-VC
Referencias:
Lugar: Quimilí; Año: 2012 p. 208
ISSN:
978-987-27759-1-9
Resumen:
Son muchos los relatos que dieron forma a este libro. Historias contadas, escuchadas y luego transformadas en palabras escritas. Entrevistas, congresos, reuniones y encuentros que, con grabadores de por medio, permitieron que hoy las voces de los compañeros y compañeras de la Central Campesina de Quimilí estén en este libro, sean este libro. Pero contar y escribir no son lo mismo; escuchar y leer tampoco. Por eso, después de mucho debate, nos pareció que sería mejor hacer pequeños cambios que facilitaran la lectura, respetando lo más posible la oralidad, lo dicho. Hay algunas cuestiones que poco podrán comprenderse si no se conoce cómo se hizo este libro. Contábamos en las Memorias de los Orígenes de la Central Campesina de Pinto que, por el año 2006, el Movimiento Campesino de Santiago del Estero ? Vía Campesina (Mo.Ca.S.E.-V.C) nos pidió que les diéramos una mano para contar su historia. Así fue como se comenzó a trabajar, primero en Pinto y después en Quimilí. En este último lugar, se comenzó por realizar una entrevista colectiva en el año 2007. Ese primer encuentro fue tan rico y emotivo que luego se transformó en una parte muy importante de este libro. En esa ocasión, entre todos decidimos hasta qué año contaríamos la historia de la Central, y definimos como criterio de cierre el momento en que la Central decidiera, por eso este libro concluye con la retoma del campo de Guevara, en octubre del año 2000. A partir de la entrevista colectiva de 2007 empezamos a armar una línea de tiempo que mostrara los hechos y momentos importantes de la historia. Más tarde, los jóvenes que estudian en la escuela de agroecología del movimiento aportaron un mapa de la Central que habían hecho. Con toda esa información, volvimos en agosto de 2009 a encontrarnos nuevamente, y todos juntos definimos qué temas no podían faltar y quiénes debían dar su testimonio; compleIntroducción5 tamos la línea de tiempo y reflexionamos sobre para quién se hacía este libro, para quiénes se escribía. En pequeños grupos trabajamos sobre los distintos momentos históricos de la Central, y realizamos algunas entrevistas a aquellos compañeros y compañeras que habían sido elegidos para que dieran su testimonio. Finalmente, las voces se transformaron en texto y el libro comenzó a tomar forma. Así fue como se mandaron copias del borrador del libro y se realizó un último encuentro para corregir entre todos la versión final, elegir las fotos, diseñar la tapa, mejorar los mapas. El periodo que abarca la historia de la Central de Quimilí nos permite narrar, también, el proceso de creación del Movimiento Campesino de Santiago del Estero: ?MoCaSE nació en Quimilí, ahí nació?, manifestaba Raimundo, uno de los más ancianos luchadores. En futuras publicaciones sobre otras Centrales se podrán relatar hechos y procesos que han involucrado a todo el movimiento pero que, por diferentes razones, resulta más rico contar en tales Centrales (como es el caso de los constantes conflictos de tierra en la Central de Pinto). Este libro está dividido en dos partes, que se complementan, pero que también pueden ser leídas por separado. En la primera parte, los relatos nos cuentan algunos de los principales acontecimientos y procesos en la historia de la Central. La descripción del paisaje de Quimilí tiene la intención de iniciar una especie de viaje imaginario que nos predisponga a experimentar la historia de otro modo, como si fuera la nuestra. Los mapas y fotos también colaboran en este intento. Las breves observaciones que incluimos, en algunos lugares del texto, buscan favorecer la ubicación en el tiempo y aclarar sólo aquello imprescindible para comprender los testimonios. La línea de tiempo tiene la misma función. En la segunda parte del libro, transcribimos aquella primera entrevista colectiva, aquel primer encuentro con el proyecto del libro. 6 Una costumbre muy arraigada en muchos pueblos americanos consiste en que las historias de antes pasen de generación en generación a través del relato oral. En algunos lugares, como en las comunidades campesinas indígenas de Santiago del Estero, sucede así. La oralidad es igual o más importante que la palabra escrita. Por eso, éste es ante todo un libro de relatos orales. O muchos relatos hechos libro. ¿Y por qué poner las palabras en papel? Quizás porque así pueden viajar más lejos, llegar a lugares inesperados, tener efectos imprevistos. Las memorias están en quienes las han contado, y seguramente en sus hijos, nietas, vecinos y compañeras. Pero no alcanza... Como manifestaba un compañero de Quimilí en el año 2009: ?Nosotros decíamos que precisamente la práctica de otros compañeros y ver que es posible otras cosas en otros lugares, por lo menos puede ser una referencia de que es posible y que existe algo diferente?