Inhala y exhala

TOMMI PARRISH; MARIELA ACEVEDO

Perfect Hair

Hotel de las Ideas

Lugar: Buenos Aires; Año: 2018; p. 5 - 6

Una lee y queda confundida...y un poco maravillada. Ese parece ser el efecto que Tommi Parrish se propone explorar en esta colección de relatos que parecen inconexos pero comparten un pulso, una suerte de trama oculta que vincula ese fluir de personajes semianónimos que resultan nuestros espejos deformados. Una tiene la ventaja de leer y releer antes de que llegue al papel. Y entonces entra de a poco a ese mundo donde figura 1 y figura 2 exploran su deseo frente a nuestros ojos, sin las pesadas cargas de lo femenino y lo masculino, solo con la ansiedad y el miedo que llevan como piel y que incomoda nuestra mirada. Sabemos que quien narra -esa voz- nos pone a prueba. Se expone y oculta en cada viñeta, nos distrae con esa paleta maravillosa para dejarnos en la completa mudez en la siguiente historia.Ese universo que se despliega detrás de este prólogo es el extraño universo de Tommi Parrish que con un despliegue gráfico alucinado y el punteo rítmico de una canilla que gotea desarma y sangra belleza. Parrish nos propone un ejercicio de pensamiento en el que los límites se vuelven difusos, en breves episodios despliega lo absurdo de las relaciones: una vieja muere y dedica sus últimos momentos a sermonear a quien la acompaña, a señalar su apariencia como inapropiada a los ojos de alguien más, de ese Otro con mayúsculas que interiorizamos y nos acompaña en nuestra travesía. Pero la mirada joven que despide a esa señora tan querida, ama y cuida de ese cuerpo arrugado, se preocupa por sus alucinaciones, escucha sus últimas quejas en el ambiente aséptico del hospital...se aman, lo expresan de la forma que pueden o aprendieron a hacerlo. Eso parecen tener en común los personajes de Perfect Hair: no es que sienten algo llamado amor, miedo o soledad sino que viven en sus complejos cruces.