INVESTIGADORES
BILLI Noelia
congresos y reuniones científicas
Título:
Sísifo declinado en neutro. La crítica blanchotiana al humanismo de Camus
Autor/es:
NOELIA BILLI
Lugar:
Belo Horizonte
Reunión:
Congreso; 12º Congresso Internacional de Estética "O trágico, o sublime e a melancolía"; 2015
Institución organizadora:
Programa de Pós-Graduação em Filosofia, Faculdade de Filosofia e Ciências Humanas, Universidade Federal de Minas Gerais (UFMG), Programa de Pós-Graduação em Estética e Filosofia da Arte, Universidade Federal de Ouro Preto (UFOP) y Associação Brasileira de
Resumen:
En 1953, Maurice Blanchot publica una serie de artículos donde recorre el itinerario de Camus en torno al absurdo a partir de las figuras de Sísifo y el hombre rebelde, centrales para comprender el alcance de la literatura camusiana. Ambos escritores parecen coincidir en el diagnóstico del presente: el hombre alcanzó durante el siglo XX un nivel de abyección que se vio intensificado por la ausencia de consuelos ultraterrenos. En este escenario, la literatura del absurdo funcionaba como una máquina reparadora que volvía a poner a lo humano de pie a partir de su rebeldía, haciendo de la lógica el bastión cuya pureza hueca funcionaba como clave de bóveda. Así pues, la "victoria lógica contra el absurdo" camusiana daba a luz un cogito renovado "Me rebelo, luego somos", haciendo del rebelde la contrafigura de un Sísifo en las sombras. El nihilismo era considerado un vacío absoluto (de moral, de principios, de naturaleza humana) a partir del cual era posible extraer una infinitud de ´posibles´ para el hombre. Blanchot eventualmente recusa esta deriva y describe el presente como región en que lo imposible constituye la esencia de lo humano, donde lo absurdo y el nihilismo son aprehendidos de forma neutra. En lugar del ´No´ del rebelde, Blanchot privilegia el rotundo ´Sí´ que suena en el vaivén de la roca de Sísifo quien, sin origen y sin tiempo, consiente en ser por completo fuera de sí. En este Afuera Blanchot, a diferencia de Camus, hallará la clave de un estar-juntos que conviene a "todos aquellos que, habiendo perdido el mundo, se agitan entre el ser y la nada; hormigueo de inexistencia, proliferación sin realidad, plaga del nihilismo: nosotros mismos". Así, la literatura del absurdo declinada en neutro nos distancia del humanismo y reaviva la disputa por el lugar del arte en un presente post-fundacional en el que arte y política se tensionan hasta el desmembramiento.