INVESTIGADORES
LIMA Maria Lourdes
congresos y reuniones científicas
Título:
Hidrogeoquímica del flúor en la Cuenca del río Quequén Grande, provincia de Buenos Aires, Argentina.
Autor/es:
MARTÍNEZ D.; QUIROZ LONDOÑO OM.; MASSONE H.; PALACIO BUITRAGO P.; LIMA M.L.
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Encuentro; I Reunión Argentina de Geoquímica de Superficie; 2009
Resumen:
El flúor es un contaminante natural de las aguas naturales. Sus efectos perjudiciales para la salud son bien conocidos, y la organización mundial de la salud ha establecido un valor máximo admisible de 1.2 mg/l para aguas de bebida. Los casos de aguas con concentraciones de flúor excediendo esta norma son muy numerosos, y se extienden por todos los continentes. En la Argentina la problemática del flúor presenta una amplia difusión en el territorio, registrándose concentraciones elevadas en las provincias de La Pampa, Buenos Aires, Tucumán, Santiago del Estero, Santa Fe y Córdoba. Se han reportado en aguas subterráneas concentraciones tan altas como 7.2 mg/l o 10 mg/l. Un aspecto muy importante acerca de la presencia de flúor como contaminante en acuíferos sedimentarios de la pampa es que en numerosos estudios se ha determinado muy buena correlación con otro contaminante de alta toxicidad, el arsénico. El flúor en el ciclo geoquímico de la corteza terrestre aparece inicialmente vinculado a rocas ígneas alcalinas y a minerales formados en depósitos hidrotermales tales como la fluorita (CaF2) y la fluorapatita (Ca5(PO4)3F). Estudios de laboratorio y de campo han demostrado que la meteorización de un mineral accesorio como la biotita basta para producir concentraciones de hasta 4 mg/l en el agua. En la llanura pampeana de Argentina, el estudio realizado por Nicolli et al. (1989) constituyó uno de los aportes más destacados en la temática, al demostrar que la disolución de las cenizas de vidrio volcánico de amplia distribución en los sedimentos pampeanos, es una fuente (posiblemente la única o más importante) fuente de flúor y arsénico en las aguas subterráneas. Estudios posteriores asignaron mucha importancia en la distribución del As y F a la adsorción desde superficies en óxidos de Fe y Mn. En este trabajo se propone utilizar una gran cantidad de información hidroquímica generada en la cuenca del río Quequén Grande, en la provincia de Buenos Aires, Argentina, para determinar los procesos geoquímicos que determinan la movilidad y abundancia del flúor en el agua subterránea. Los resultados esperados contribuirán a la comprensión del ciclo geoquímico del flúor, y en consecuencia a la gestión de aspectos de calidad del agua en la llanura pampeana. El río Quequén Grande ocupa una gran cuenca (10.000 km2) rellena por una potente secuencia de sedimentos Cenozoicos de constitución limo arenosa y con intercalaciones limo-arcillosas, que forman un acuífero clástico multicapa libre, cuya recarga se produce por la infiltración de los excedentes hídricos de precipitación, y cuya descarga se produce mayoritariamente hacia los cursos de agua superficial de la cuenca. En el marco de varios proyectos de investigación se han tomado muestras de agua superficial y subterránea. Las muestras de agua superficial se tomaron en cinco puntos de la red fluvial con una frecuencia semanal durante tres años. Muestras de agua subterránea se tomaron en alrededor de 50 pozos someros, de entre 15 y 40 metros de profundidad. En general se han tomado un par de muestras anuales en cada pozo. En todas las muestras se determinó la composición química en iones mayoritarios por métodos estándar. Además se determinaron concentraciones de NO3-, Si y F-. La concentración de flúor en el agua superficial (n=658) varía desde 0 hasta 6.5 mg/l, presentando un promedio de 2.1 mg/l. En el agua subterránea (n=228) varía entre 0 y 5.7 mg/l, presentando una mayor frecuencia los valores comprendidos entre 0.6 y 2.4 g/l. Se han representado las muestras de agua subterránea en dos diagramas de Piper. En el primero se representaron todas las muestras con concentraciones de flúor menores que 1.2 mg/L y en otro las muestras con las concentraciones de flúor mayores a 1.2 mg/l. Si bien no se observa una diferencia muy destacable, puede decirse que todas las muestras con concentraciones mayores que 1.2 mg/l están asociadas aguas de la facies bicarbonatada sódica, mientras que las concentraciones menores a 1.2 ml/l se asocian con facies bicarbonatadas sódicas, cálcicas y magnésicas. Se calculó en índice en de saturación (IS) en fluorita para cada muestra de agua superficial y subterránea. Los resultados se representan en un gráfico de concentración de F- contra IS. En ambos casos se observa que a medida que se incrementan las concentraciones de flúor se acerca en forma exponencial hacia la condición de equilibrio, la cual es sólo alcanzada en pocas muestras. El contenido de flúor en la cuenca define una zona con valores entre 3.6 y 4 mg/l en el sector sur oeste. Esta distribución es aproximadamente coincidente con la de la salinidad, pero resulta muy notable el sector de mayores concentraciones en el sector centro-sudoccidental que no se corresponde con la dirección de flujo hacia la descarga. En ese sector afloramientos de rocas de Ventania estarían aportando las mayores concentraciones.