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Los insectos son un grupo numeroso y diverso de organismos que participa en distintos procesos ecológicos y contribuye al funcionamiento de los ecosistemas. La diversidad de estos organismos está disminuyendo como consecuencia de distintos disturbios antrópicos, lo que compromete la provisión de varios servicios ecosistémicos (ej. polinización y control biológico) fundamentales para la producción de alimento. La intensificación de la agricultura constituye una de las principales causas de pérdida de biodiversidad debido al uso de plaguicidas sintéticos y fertilizantes inorgánicos. En este contexto, resulta esencial desarrollar estrategias alternativas de producción de alimentos que resulten ecológicamente más sustentables. El desarrollo de insecticidas botánicos constituye una herramienta amigable con el ambiente para el control de insectos plaga. Nuestro grupo trabaja, desde hace 15 años, en colaboración con el Laboratorio de Química Fina (UCC) evaluando compuestos botánicos con efecto insecticida. Hemos registrado que el extracto crudo de ?paraíso? Melia azedarach L, obtenido de distintas estructuras de planta, tiene efecto repelente, antialimentario y tóxico sobre 24 especies de insectos fitófagos y cuatro especies de hematófagos. En general, los insectos fitófagos generalistas con aparato bucal masticador son los más afectados por el extracto y su aplicación por contacto es más efectiva para estados inmaduros que para adultos. Los insectos predadores y parasitoides no fueron afectados al ser rociados con el extracto, aunque cuando fueron obligados a ingerirlo la supervivencia de estos enemigos naturales se vio afectada. También hemos evaluado 89 extractos obtenidos de plantas nativas de las sierras de Córdoba buscando compuestos activos contra la hormiga cortadora Acromyrmex lundi. Actualmente se evalúan a campo extractos de Aristolochia argentina, Flourensia oolepis, Gaillardia megapotamica, Lantana grisebachii y Lithraea molleoides, activos en condiciones de laboratorio. También se están llevando a cabo estudios en huertas agroecológicas para conocer el efecto del extracto de paraíso sobre insectos fitófagos, sus enemigos naturales y polinizadores (Figura 1). El control biológico de las plagas por parte de sus enemigos naturales es uno de los servicios ecosistémicos más importantes que proveen los insectos. Nuestro grupo de trabajo ha realizado (desde 1990) numerosos estudios básicos para el control de moscas minadoras en cultivos hortícolas. Hemos registrado las especies de avispas parasitoides con mayor potencial para regular a los minadores, las especies de malezas que son hospedantes alternativos indeseados y las que pueden actuar como proveedores de controladores biológicos. Hemos observado que la riqueza de especies de insectos, total y por gremio (fitófagos, predadores y parasitoides), así como la abundancia de insectos benéficos, fue significativamente mayor en huertas agroecológicas en comparación con aquellas manejadas en forma convencional. En agroecosistemas de cultivos extensivos (trigo, avena y alfalfa) de la Región Pampeana hemos estudiado las tramas tróficas integradas por plantas, áfidos y parasitoides a fin de proponer sistemas de cría abierta de estos últimos, como estrategia de control biológico conservativo. Allí observamos que aproximadamente el 60% de los parasitoides proviene de bordes con vegetación espontánea y que existe relación directa entre la proporción de bordes en el cultivo y control biológico de áfidos (Figura 2). En la actualidad estamos realizando estudios similares en agroecosistemas de cultivos intensivos. También estudiamos las plantas con flores que crecen espontáneamente en los márgenes de cultivos hortícolas y que ofrecen recursos alimenticios a enemigos naturales de insectos plaga (Figura 3). Particularmente evaluamos si plantas nativas y exóticas proveen estos recursos de igual manera. Observamos que flores de treinta especies vegetales del total de 60 analizadas fueron visitadas por enemigos naturales, sin detectar preferencia por recursos florales nativos o exóticos. En futuros trabajos, planeamos evaluar otros factores que pueden influir en el modo en que los enemigos naturales utilizan recursos florales y evaluaremos el rol de la morfología y de la diversidad funcional de las flores para los enemigos naturales.La abundancia y diversidad de insectos y los servicios ecosistémicos que estos pueden proveer dependen de factores que operan a escala local (campo) y también a escalas mayores (paisaje). En este contexto, estudiamos el intercambio de insectos entre fragmentos de bosque Chaqueño Serrano y el cultivo de soja. Más de 1000 especies fueron encontradas en estos ecosistemas y hasta 255 especies y 5450 individuos se mueven entre bosque y cultivo por semana. Además, el número de especies de insectos disminuye a medida que se pierde bosque y a mayores distancias de los fragmentos (Figura 4). Se observó que en lotes de soja ubicados en áreas con poco bosque el control de huevos de chinches fitófagas por enemigos naturales es menor que en lotes rodeados por mucho bosque. En el futuro pretendemos evaluar qué otros aspectos de la configuración del paisaje afectan a las plagas de cultivos y sus enemigos naturales.La urbanización es también un fenómeno a escala de paisaje que puede afectar las relaciones planta-herbívoro-enemigos naturales. En nuestro grupo hemos estudiado los efectos de la urbanización y de la disponibilidad de recursos sobre interacciones herbívoro-parasitoide. Encontramos que la urbanización favorece la abundancia de minadores de hojas y genera cambios en la composición de especies de parasitoides. A nivel local, hubo una mayor riqueza de especies de parasitoides y parasitismo en parches de plantas más grandes y menos aislados. Actualmente estamos investigando efectos de corredores urbanos y techos verdes en comunidades de insectos (Figura 5). Proyectamos estudiar servicios ecosistémicos (polinización y control biológico de plagas) en huertas urbanas identificando factores a distintas escalas espaciales. Por otra parte, evaluamos a través de simulaciones el efecto de plantas trampa en la población de una especie plaga, y encontramos que el cultivo trampa sumado a una aplicación de insecticida en el mismo reducen la población de la plaga en el cultivo focal.Los resultados de nuestras investigaciones son incorporadas a las clases que dictamos para alumnos de grado de la carrera de Ciencias Biológicas (Entomología y Control de organismos); de postgrado en la Facultad de Ciencias Agropecuarias (UNC) y Ciencias Químicas (UCC). A su vez, participamos en eventos abiertos a toda la comunidad (ej.:?El día de la fascinación por las plantas?) a través de conferencias, juegos interactivos, folletos educativos, etc. para divulgar el conocimiento generado (Figura 6).

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