INVESTIGADORES
MARTINEZ Jorge Gabriel
congresos y reuniones científicas
Título:
Cazadores-recolectores puneños bajo la lupa: Peñas de la Cruz 1.1 y su registro (Antofagasta de la Sierra, Catamarca)
Autor/es:
FUNES CORONEL, JORGE A.; ARREGUEZ, GUILLERMO A.; MARTÍNEZ, JORGE G.
Lugar:
San Miguel de Tucumán
Reunión:
Jornada; VII Jornadas de Comunicaciones; 2005
Institución organizadora:
Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo
Resumen:
En
este trabajo se resumen los resultados logrados en el proceso de investigación
del sitio arqueológico Peñas de la
Cruz 1.1 (PCz1.1), destacando por una parte todo lo
relacionado a la etapa de campo (prospección y excavación), y por otra las
tareas de laboratorio.
La
detección de PCz1.1 resultó de trabajos de prospección realizados durante una
campaña en 1998. El mismo se encuentra a 3665 msnm en la Puna meridional
argentina, en las cercanías de la localidad de Antofagasta de la Sierra (Catamarca). Se
trata de un alero rocoso y constituye un importante locus que cuenta con evidencias estratificadas sobre la presencia
de grupos cazadores-recolectores durante el lapso que va de ca.7910 a 7270 años antes del presente
(Martínez 2005).
Próximo
a PCz1.1, en el curso medio del Río Ilanco (actualmente un paleocauce), se
identificó también un afloramiento rocoso de origen volcánico compuesto por una
variedad de roca de grano muy fino y de muy buena aptitud para la talla de
artefactos en general (Vulcanita 2 ó Vc 2). El mismo se ubica a 600 m al SE del sitio, y es
una importante fuente de aprovisionamiento, ya que además de ser la roca
dominante del conjunto artefactual de PCz1.1, ya había sido registrada en otros
sitios del área como Quebrada Seca 3 (Capa 2b14: ca.7350 AP) (Martínez 2003).
Si
bien por el momento sólo se excavó 1
m2, los hallazgos constituyen un corpus de evidencias de alta
significación cultural. Los vestigios arqueológicos bajo análisis proceden de
una secuencia estratigráfica compuesta por cuatro capas de origen antrópico (y
subcapas, o extracciones): Capas 0 (a, b y c); 1; 2 (1ª a 5ª) y 3 (1ª y 2ª),
las cuales conforman un ?paquete? estratigráfico de 50 cm de potencia total. Debe
destacarse que la capa 2, con sus cinco extracciones (16,5 cm de espesor total),
fue la más relevante debido a la cantidad y diversidad de los restos
arqueológicos hallados in situ
durante su excavación. Entre ellos fueron recuperados diversos artefactos
líticos formatizados (N=48), desechos de talla, astiles e intermediarios de
proyectiles (N=9), retocadores sobre hueso (N=18), cordeles de fibra vegetal y
animal, nudos simples de gramíneas, cuentas sobre valva de moluscos, restos
óseos animales, cueros y diversas plumas y raquis de aves.
En
cuanto al material lítico, debe mencionarse que la densidad de desechos de
talla en este sitio es altísima. Como ejemplo, los desechos de la 1ª extracción
de Capa 2, correspondientes sólo a uno de los cuatro microsectores excavados
(50 x 50 cm,
microsector ?a?) suman un total de 2377 especímenes, con un número mínimo de
desechos (NMD) igual a 1311, en donde la dominancia está dada por la Vc 2 (60,0% del NMD). Esto,
agregado al hallazgo de numerosos retocadores sobre hueso (18 en total),
indican que el sector excavado constituyó un área de actividad específica,
relacionada con diversos y recurrentes episodios de formatización y/o
mantenimiento de artefactos líticos, dominantemente bifaciales. En relación al
conjunto de artefactos formatizados, las puntas de proyectil suman 36 (entre
enteras y fracturadas), y representan el 75,0 % del total (N=48).
Un
importante volumen de sedimento procedente de excavación, por contener
numerosos desechos de talla y otros elementos menores a 1 cm2, fue
embolsado para su posterior análisis en laboratorio. Del proceso de separación
realizado por selección manual, surgieron materiales que no habían sido
registrados durante la excavación. Entre ellos, podemos mencionar la
recuperación de diversos exoesqueletos de insectos, pinzas de crustáceos,
garrapatas y quinoa silvestre (Chenopodium
quinoa Willd.) (L. Giusti com. pers.). El registro de este pseudocereal de
alto valor energético, es muy importante para el Holoceno Medio, ya que permite
ampliar la base de recursos de subsistencia de estos grupos esencialmente
cazadores, tal como lo evidencian los numerosos restos arqueofaunísticos
asignados a Camelidae (más del 90 % del NISP; M. Mondini com. pers.).
Las
evidencias analizadas permiten plantear a este sitio como un campamento
logístico direccionado tanto al aprovisionamiento de recursos líticos y/o
formas base, como a la confección y mantenimiento de sistemas de armas para la
caza. Sin embargo queda claro entonces, como ambas modalidades de trabajo
potencian en forma integral el alcance de las interpretaciones e implicancias
arqueológicas de un sitio. La presencia de quinoa en PCz1.1, intentará echar
luz sobre el problema del consumo de vegetales alimenticios para este momento,
como complemento de una dieta básicamente cárnea. Futuros estudios ampliarán
los conocimientos aquí aportados, tendientes a lograr una visión integral del
modo de vida de estos antiguos cazadores puneños.