Solución de problemas interpersonales en escolares: Exploración de las habilidades socio-cognitivas

ISON, MIRTA SUSANA

San Juan

Congreso; XXXVIII Congreso Interamericano de Psicología; 2021

Sociedad Interamericana de Psicología

Ver resumen en PÁGINA 365Un problema interpersonal es definido como aquella situación de interacción social, en la que participan dos o más personas, en la cual los deseos, necesidades, objetivos o metas de alguna/s de ellas no concuerdan con los deseos y/o objetivos de las otras personas involucradas en la interacción. Esta discordancia conlleva a estados emocionales negativos en las personas interactuantes. La solución de problemas interpersonales implica un conjunto de destrezas y procesos cognitivos - afectivos orientados a la autoregulación del comportamiento en pos de una solución efectiva. Estudios realizados en escolares señalan la relevancia de explorar los procesos de pensamiento ante un problema interpersonal, es decir cómo piensan el problema y qué estrategias socio-cognitivas se ponen en marcha para su solución. Bajo esta perspectiva, el propósito de este trabajo fue explorar las habilidades socio-cognitivas para la solución de problemas interpersonales en niños de 9 a 11 años, específicamente la descripción del problema, identificando componentes emocionales; el pensamiento alternativo (flexibilidad cognitiva); pensamiento consecuencial (anticipación de consecuencias) y la toma de decisiones. Los resultados preliminares obtenidos indicaron que en ambos grupos etarios (9 y 10-11 años) tanto varones como mujeres, pudieron generar mayor cantidad de alternativas asertivas en comparación con alternativas pasivas y recurrentes a la autoridad. Al analizar la variable anticipación de consecuencias, los resultados mostraron que ambos grupos pudieron anticipar mayor cantidad de consecuencias positivas en comparación con las de tipo irrelevantes y negativas. En la variable toma de decisiones, la mayoría de los niños pudo tomar una decisión adecuada, vinculándola con una mención de un estado emocional positivo. Se destaca la importancia de analizar dichas habilidades que están a la base de las conductas socialmente competentes e influyen en el comportamiento social infantil.