Eficiencia de fungicidas foliares en el control de mancha angular (Phaeoisariopsis griseola (Sacc.) Ferraris) en el cultivo de Phaseolus vulgaris L., en Tucumán, Argentina

GÁLVEZ, M R; GÓNZALEZ, V; PLOPER, L.D.; ZAMORANO, M A; VIZGARRA, O N

Gramado, Río Grande do Sul

Congreso; XXXVII Congresso Brasileiro de Fitopatología.; 2004

Sociedad Brasilera de Fitopatología

La mancha angular es una de las enfermedades más importantes del poroto en la provincia de Tucumán, Argentina. La enfermedad afecta todas las partes aéreas de la planta, pero los síntomas más severos se presentan en hojas y vainas.  Para el control de mancha angular se recomienda el uso de fungicidas foliares durante el período reproductivo. El objetivo de este estudio fue determinar la eficiencia de diferentes fungicidas y el momento de aplicación para el control de la mancha angular.  Los estudios se efectuaron bajo condiciones de campo durante dos campañas agrícolas (2002 y 2003), utilizando el cultivar TUC 500. Se evaluaron fungicidas del grupo de los bencimidazoles (carbendazim, metiltiofanato), triazoles (la mezcla de propiconazole + difenoconazole) y estrobilurinas (azoxystrobina, pyraclostrobin y trifloxystrobin) . Todos los fungicidas fueron evaluados en aplicaciones única a los 35 días  y  a los 55 días y en aplicación doble (35 + 55 días). Se evaluaron: nivel de colonización fúngica en hojas y vainas (severidad) y rendimiento. Las parcelas tratadas mostraron en general hojas con menores niveles de severidad y una mayor persistencia del follaje. Los tratamientos que incluyeron carbendazim y metiltiofanato en los tres momentos de aplicación mostraron severidad entre 32,0 al 51,5 %. Con la mezcla de propiconazole + difenoconazole en aplicación a los 35 o 55 días se registró una severidad del 29,5 % y en las dos aplicaciones valores del 18,5 % de superficie foliar afectada. Los estrobilurinas mostraron un mejor comportamiento a los 55 días con un porcentaje del 4.5 % de severidad. Las dobles aplicaciones no lograron disminuir estos valores de severidad. Los mayores aumentos de rendimiento con relación al testigo no tratado se alcanzaron con estrobilurinas en una aplicación a los 35 días (32,5%)  y  en dos aplicaciones a los 35 + 55 días (39,5 %).