INVESTIGADORES
NIEVA Guillermo Rene
artículos
Título:
FORMAS DE INTEGRACIÓN SOCIO-FUNCIONAL DE LOS DOMINICOS CASTELLANOS DE LA OBSERVANCIA
Autor/es:
GUILLERMO NIEVA OCAMPO
Revista:
Temas de Historia Medieval
Editorial:
CONICET
Referencias:
Año: 2006 vol. 12 p. 157 - 193
ISSN:
0327-5094
Resumen:
La reforma de los religiosos a finales de la Edad Media fue un proceso largo, complejo y conflictivo. De hecho el conflicto mismo es parte de su esencia. En las comunidades dominicas castellanas se originó como movimiento hacia 1420, logrando un gran vigor durante el reinado de los Reyes Católicos, y alcanzó su estabilización a medidos del siglo XVI. A lo largo del siglo XV la comunidad de frailes del convento de San Esteban había logrado mantener la observancia religiosa y proveer a todos los oficios conventuales con una población medianamente estable. La aparición violenta de los observantes apoyados por la monarquía en 1475, impulsó a la comunidad a fijar su posición frente a la reforma y a componer un programa propio que incluía, además del cultivo de las ciencias y la obtención de grados académicos, la elección del tomismo como sistema ideológico integral y el mantenimiento de las propiedades comunitarias conventuales que en esos años se habían incluso acrecentado. Sin violencia, mediante un acuerdo, la observancia se instaló en el convento de San Esteban en 1486. La incorporación de los frailes salmantinos a la Congregación de la reforma significó su alistamiento en un proceso de influencia social y socialización que, de forma directa e indirecta, se había propuesto modificar pensamientos, sentimientos y conductas en los frailes que se encontraban bajo su jurisdicción. El subsiguiente recambio generacional y las disposiciones represivas que los superiores aplicaron a raíz de la participación de los frailes en la guerra de las Comunidades, lograron la estabilización del grupo. A partir de entonces se estableció la armonía en el grupo y un mayor rendimiento. La población conventual creció enormemente, al tiempo que una administración adecuada e innovadora lograba la organización eficaz de sus bienes La historia del convento reformado de San Esteban de Salamanca se convierte en la historia del reflorecimiento del monaquismo. Los dominicos reformados se incluyeron en la comunión de los santos y en una vida religiosa saturada de intercesores ligados por una jerarquía mimética: la Virgen inmaculada, los santos triunfantes y los frailes reformados, tal como lo presenta la fachada de la iglesia de San Esteban. Asiduos practicantes de la comunión y de la confesión sacramental, sostenidos por los votos y por la regla, los frailes habían recibido más que los demás cristianos, semejante a cuánto habían sacrificado en esta vida.