El Estado y las crisis. Continuidades y rupturas en el mundo del trabajo. Argentina (1930-1955)

BLACHA, LUIS ERNESTO

Viena

Congreso; 54th International Congress of Americanists “Building dialogues in the Americas”; 2012

International Congress of Americanists - Universität Wien

El golpe de Estado del 6 de septiembre de 1930 supone un quiebre en los procesos de socio y psicogénesis (Norbert Elias) que venían desarrollándose en la Argentina como parte de una sociedad democrática. La crisis económica, política e institucional produce cambios profundos en las relaciones de poder asimétricas entre gobernantes y gobernados, que se ejemplifican, especialmente, en el ámbito de laboral. La participación política como mediación institucional es reemplazada por el intervencionismo estatal, como un espacio directo donde interactúan y se establecen acciones recíprocas (Georg Simmel) entre quienes detentan el poder y aquellos a quienes va dirigido. El rol del Estado como mediador de la relación gobernantes-gobernados, se profundiza con un nuevo golpe de Estado, el del 4 de junio de 1943 que la sociedad asimila a un retorno a la democracia. La emergencia del peronismo nacional, dirigista y planificador, acentúa la relación directa del Estado con el “pueblo trabajador”. Entre ambas configuraciones (1930-1943 y 1943-1955) las relaciones de poder presentan continuidades y rupturas. Los efectos de la crisis económica y política, pero eminentemente social y sus intentos de respuesta, reflejan estas transformaciones y las diferentes propuestas articuladas por el Estado y la sociedad civil. A través del estudio de la creación y evolución del Departamento Nacional de Trabajo (1907-1943) y de su transformación en Secretaría de Trabajo y Previsión de la Nación (1943) -como expresión institucional pero parcial de ese mundo del trabajo- es posible caracterizar las permanencias y cambios acontecidos durante los 25 años del período histórico elegido. Desde este objeto de análisis se pretende un abordaje que incluye tanto la perspectiva del Estado como la de los sectores trabajadores y sus vínculos con la cuestión social. El concepto de poder como capacidad, propuesto por Steven Lukes, permitirá dar cuenta de los cambios producidos, que abarcan tanto al fundamento del poder como la relación entre esas instituciones estatales, sus políticas y los trabajadores.