INVESTIGADORES
MALBRAN Ismael
congresos y reuniones científicas
Título:
Fusarium spp: Problemática en especies hortícolas y ornamentales.
Autor/es:
GLADYS A. LORI; ISMAEL MALBRÁN
Lugar:
La Plata
Reunión:
Jornada; IV Jornadas de Enfermedades y Plagas en Cultivos Bajo Cubierta; 2015
Institución organizadora:
CIDEFI-CIC-UNLP, INTA
Resumen:
El género Fusarium es cosmopolita y comprende muchas especies que se encuentran comúnmente presentes en el suelo y son causantes de distintas enfermedades. Entre las más importantes se encuentran las Podredumbres basales (de raíces, cuello, tallo) y los Marchitamientos o Fusariosis vasculares. Una importante proporción de la población de Fusarium spp. presente en los suelos cultivados se comportan como oportunistas y colonizan los tejidos vegetales (raíces, cuello, tallos) después que la planta está debilitada o sufrió estrés. Estos microorganismos producen una invasión primaria o secundaria de los tejidos del hospedante originando debilidad en las raíces, seguida por la aparición de síntomas de enanismo, clorosis, marchitamiento y otros síntomas declinantes. Como consecuencia, el aislamiento de especies de Fusarium asociadas a problemas en las raíces o en la parte basal de los tallos, no siempre es indicativo de que dichas especies hayan sido la causa del problema.La mayoría de estas especies que se asocian a Podredumbres basales (F. oxysporum, F. solani, F. equiseti, F. verticillioides, etc) (Lori et al., 1990, Wolcan y Lori, 1992, Wolcan et al., 1993, Lori et al., 1998) no son específicas y los factores de estrés tales como la sequía, el anegamiento, daños mecánicos, químicos, pH ácido de los suelos, el manejo incorrecto del cultivo o el ataque simultáneo en raíces y tallos de otros microorganismos o nematodes pueden predisponer a la planta a una infección por Fusarium spp. Asimismo, abundan en los suelos muchos aislamientos pertenecientes a estas mismas especies de Fusarium (F. oxysporum, F. solani, F. equiseti, etc) que no son capaces de causar enfermedad y son las denominadas saprófitas o no patógenas y cumplen una función benéfica en los suelos. Son los denominados saprófitos o no patógenos.En cuanto a los Marchitamientos, éstas son enfermedades devastadoras y económicamente muy importantes, muy comunes en los principales cultivos hortícolas y ornamentales, son causadas por F. oxysporum (Gordon y Martyn, 1997), y dentro de esta especie para la que existe especificidad fisiológica, se encuentran las formas especiales (f. sp.), capaces de infectar hospedantes específicos, así F. oxysporum f. sp. dianthi produce marchitamiento en clavel (Dianthus caryophyllus), mientras que F. oxysporum f. sp. cyclaminis lo hace en Cyclamen persicum, también cabe mencionar otras formas especiales en ornamentales como F. o. f. sp. gladioli, F. o. f. sp. crysanthemi.. En tomate (Solanum lycopersicum) se cita a F. o. f. sp. lycopersici y F. o. f. sp. radici-lycopersici. Entre otras hortícolas a F. o. f. sp. basilici en albahaca y F. o. f. sp. lactucae en lechuga. En el mundo hay identificadas más de un centenar de f. sp. y para complicar más aun esta situación existen razas patogénicas dentro de las ff. sp. que provocan la enfermedad en ciertos cultivares del hospedante específico (Armstrong y Armstrong, 1981; Michielse y Rep, 2009).Las cepas patógenas de Fusarium oxysporum son indistinguibles desde el punto de vista morfológico, biométrico y cultural de las cepas saprófitas o no patógenas, como también lo son sus ff. sp. y sus razas, no se pueden diferenciar unas de otras. Este aspecto añade aún más complejidad al estudio de este microorganismo.Al efectuar un aislamiento de la planta enferma, el obtener como producto de ese aislamiento una colonia de Fusarium spp no es indicativo que este aislamiento sea el responsable de la patología como tampoco se lo puede asociar exclusivamente a su hospedante, asignándole una f. sp. Son necesarias distintas pruebas para corroborar la especie de la cual se trata y, otras tantas para determinar si es fehacientemente una forma especial o si se trata de un aislamiento de Fusarium spp o de F. oxysporum no patógeno u oportunista.Muchas veces los Marchitamientos se diagnostican por el aspecto marchito que tienen las plantas, sin efectuar un análisis fitopatológico, ese tipo de diagnóstico no es concluyente, la falta de turgencia en la parte aérea de la planta, semejante a un síntoma de marchitamiento, no solo puede ser atribuido a un Marchitamiento típico (Fusariosis vascular) sino también al ataque de cualquier otro patógeno del suelo u organismo que pueda destruir los tejidos del sistema radicular y basal de las plantas. En cuanto al diagnóstico, un test de patogenicidad mediante inoculación artificial ha sido el método más popular y convencional. Se utilizó como estrategia para identificar ff. sp. y, con el empleo de cultivares diferenciales, para la identificación de razas. Sin embargo, este método demanda mucho tiempo y no tiene una respuesta rápida, además de que los resultados suelen ser aleatorios y no son concluyentes, debido a que pueden estar afectados por un amplio rango de factores, incluyendo los ambientales.Otra técnica frecuentemente utilizada es la identificación de grupos de compatibilidad (VCGs) que permite para muchas formas especiales de F. oxysporum, agrupar aislamientos patógenos específicos y separarlos de la población de F. oxysporum no patógena (Correll 1991; Lori et al., 2012).Las herramientas moleculares basadas en la secuenciación o en la amplificación de porciones del genoma mediante el uso de marcadores moleculares (RFLP, AFLP, RAPD) (Kistler, 1997; Lievens et al., 2008) han sido ampliamente utilizadas en combinación con las anteriores, para la diferenciación de ff. sp. y razas de F. oxysporum, diferenciando f. sp. y razas, como así también permitiendo la discriminación entre aislamientos patógenos y saprófitos (Lori et al., 2004; 2014; Malbrán et al., 2014).Por tratarse de típicos patógenos vasculares, estos microorganismos son de muy difícil manejo en los sistemas productivos. Son capaces de sobrevivir en los suelos por muchos años y de ser trasladados e ingresar en ambientes que estaban libres de ellos a través de material de propagación infectado, partículas de suelo llevadas por el hombre, herramientas, etc.Muchos marchitamientos pueden ser manejados a través de la implantación de cultivares resistentes o de buen comportamiento hacia la f. sp. o a la raza previamente identificada en el cultivo o en el área de producción. Por este motivo, en los últimos años se está dando preponderancia al estudio ya no de cepas patogénicas puntuales si no a poblaciones del patógeno. Con ello se logra un conocimiento más acabado de la dinámica de las poblaciones patogénicas y saprófitas presentes en los suelos, lo que permite lograr un correcto manejo de estas enfermedades devastadoras.En esta presentación se expondrá y diferenciará la sintomatología de las patologías producidas por especies del género Fusarium en las especies hortícolas y florícolas de mayor producción en la Argentina, como así también se realizará una síntesis de los resultados obtenidos mediante el empleo de las nuevas herramientas para el diagnóstico y el estudio de las f. sp. de F. oxysporum presentes en suelos del área.