El rol y el alcance de la medición en la simulación astronómica

BOZZOLI, MAXIMILIANO; PAZ, DANTE

Epistemología e Historia de la Ciencia

Editorial de la Facultad de Filosofía y Humanidades, UNC.

Lugar: Córdoba; Año: 2010; p. 110 - 117

Este trabajo se sitúa dentro del contexto en el cual las simulaciones computacionales juegan un papel esencial como auxiliares de la práctica observacional en la astronomía. Uno de los roles más importantes tiene que ver con la función que poseen tales simulaciones con respecto a determinadas mediciones de ciertos fenómenos y objetos astronómicos. En este sentido, los modelos de simulación computacional suelen arrojar resultados, los cuales son eventualmente medibles o cuantificables. Esto hace que tales modelos sean entendidos como representaciones de determinados sistemas astrofísicos. Mediante el uso de ciertos programas computacionales, dichas representaciones son implementadas en la computadora. Esta última posee, entre otras funciones, la capacidad de servir como un aparato o instrumento para medir la salida de los datos proporcionados por los modelos de simulación. Aunque exista una fuerte tendencia a unificarse y a ocupar el mismo estatus o nivel epistemológico dentro de la práctica observacional/experimental, la medición posee diversos rostros epistémicos con respecto a la simulación y a la observación convencional. Así, el concepto de medición se halla sujeto a una cierta tensión originada por estos dos ámbitos dentro de la práctica científica. De esta manera, el objetivo del presente trabajo consiste en mostrar el alcance que poseen las mediciones logradas a partir de las simulaciones computacionales con respecto a aquellas obtenidas mediante la observación tradicional. Para mostrar esto, se tomará como hipótesis de trabajo la conceptualización y el análisis planteado por Morrison (2009), quien sostiene la idea de que los modelos de simulación poseen la capacidad de funcionar como instrumentos de medición. En su trabajo expone además las diferentes maneras en las cuales puede afirmarse que la simulación constituye y forma parte de la experimentación. De esta manera, logra establecer diversas conexiones entre las simulaciones y las diferentes estrategias para el modelado de ciertos objetos; las cuales forman parte esencial de la actividad experimental. Esto permite clarificar los contextos en los cuales se desarrollan las simulaciones computacionales para vincularlas a dicha práctica. Según este esquema epistemológico, Morrison afirma que determinar las posibles conexiones entre los diferentes modelos y la medición es importante para distinguir entre medición y cálculo y, a su vez, entre experimento y simulación. Es sabido que la medición tradicional se encuentra ligada al mundo físico de alguna manera causal a través de determinados aparatos. A diferencia de ello, el cálculo se halla relacionado a la actividad matemática, es decir, al pensamiento abstracto que se plasma en papel o en una simulación por computadora. Morrison sostiene la idea de que los sistemas de simulaciones actuales, al tener la capacidad de funcionar como instrumentos de medición, forman parte de la práctica experimental. En las últimas décadas, las simulaciones han evolucionado notablemente y han dejado de ser meras masticadoras de números para convertirse en herramientas insustituibles en dicha práctica. Para ilustrar esto se tomará en consideración un ejemplo astronómico que compara las predicciones de un modelo de simulación con determinadas observaciones sobre las formas de cúmulos y grupos de galaxias. Este ejemplo muestra la concordancia entre los resultados obtenidos por la vía computacional y la observacional. De esta forma, el modelo de simulación es diseñado y construido de tal manera que provee una simulación de la observación. La concordancia entre ambos resultados es representada en forma visual tanto por el modelo computacional, como por los catálogos de galaxias provistos por el modelo observacional tomado bajo consideración. Finalmente, se produce un modelo de contraste que compara la salida de datos simulados, los cuales son medidos y cuantificados, con los datos obtenidos a partir de mediciones telescópicas. Así, las diversas conexiones existentes en dicho modelo de contraste muestran el importante rol y el alcance que posee la medición en la simulación astronómica.