INVESTIGADORES
SEVESO ZANIN Emilio Jose
congresos y reuniones científicas
Título:
La dignificación de los excluidos: sensibilización y participación como estrategias de edificación urbana
Autor/es:
EMILIO J. SEVESO ZANIN; ELIANA ABRAHAM
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Jornada; III Jornadas sobre Derechos Humanos de la Facultad de Filosofía y Humanidades. 40 años de democracia: compromisos, movimientos, disputas; 2023
Institución organizadora:
Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba
Resumen:
El presente trabajo discute las formas de escenificación que adoptan las políticas de integración urbana, cuestionando los mecanismos de interpelación y gestión gubernamental en sectores subalternos. El debate está centrado en las iniciativas estatales que procuran definir los rumbos y transformaciones de las ciudades contemporáneas; en particular, mediante estrategias de intervención territorial que promueven la colaboración activa de los pobladores. Para abordar el problema nos centraremos en una zonificación periférica de la ciudad de San Luis (Argentina), actualmente afectada por una política de reorganización espacial que afirma, según las declaraciones oficiales, “estar cambiando la vida de más de 1200 familias”. Dicho espacio barrial, denominado por los pobladores como “Barrio República”, fue en sus comienzos un asentamiento ilegal, cuya extensión en la zona oeste de la ciudad está marcado por múltiples intervenciones y negociaciones tramadas por las gestiones municipal y provincial. Su emergencia es resultado de un proceso de larga duración, caracterizado por el límite de las actuales políticas nacionales y provinciales de desarrollo y producción, que vienen reforzando los focos de marginalidad urbana y la estructura de emplazamientos fragmentarios, dando lugar a la emergencia de ocupaciones ilegales hacia los bordes de la ciudad capital.De manera reciente, a partir del movimiento de integración urbana, motorizado por distintos organismos públicos del Estado, el “República” fue incluido en la agenda de intervención para barrios populares y asentamientos irregulares del país. Así, en marzo del año 2022, fue presentado oficialmente el “Proyecto de Urbanismo Colaborativo con Perspectiva de Género”, con fondos nacionales y provinciales para el abastecimiento de bienes y servicios en el territorio. La escenificación de dicho proyecto conjuga un plexo de elementos -que vía soportes mediáticos- proyecta los rostros de quienes disponen sus cuerpos a la serie de acciones desplegadas desde el aparato estatal. En tal sentido, el ideal de la “integración urbana” constituye la forma totalizante que moviliza las acciones de intervención sobre el espacio vivible, que avanzan desde dos frentes estratégicos complementarios produciendo formas de hábitat y habitabilidad específicas como “dignificación”. En particular, la geografía del conflicto espacial busca ser suturada mediante la implementación de mecanismos de inclusión estratégica; promovidos, en un primer plano, “desde abajo” (de acuerdos con la participación activa de los pobladores en reuniones vecinales, trabajo voluntario de relevamiento y difusión de actividades), pero según los los lineamientos y encuadres que son forjados “desde arriba” (en virtud de criterios técnicos racionalistas, como el uso de sistemas de información y el mapeo cartográfico mediante drones). Como resultado, territorios, personas y colectivos son atravesados por una compleja dinámica de producción de orden, expresada en renovadas estrategias de edificación urbana, así como en novedosas tecnologías sociales de sensibilización y participación. Con ello, los enlaces sociales, nutridos de la fuerza colectiva y el sostén de la horizontalidad, son activamente subsumidos y cercados por lazos verticales; capturados para la proyección del ideal de una ciudad “en progreso”.La consagración pública de esta política da paso aquí a un cuestionamiento sobre sus efectos territoriales y sensibles. Si desde hace algunos años la gestión de gobierno viene insistiendo en el carácter integrador de sus medidas (de acuerdo con slogans como “San Luis, un gobierno para todos”, 2011; “San Luis, todos somos uno”, 2017; y “San Luis, nos une”, 2018), aquí el contrapunto entre lo planificado/lo vivido retorna para interrogar los efectos de la proyección totalizante en el espacio; sus diseños e intervenciones, predispuestos para articular experiencias múltiples en la alusión/ilusión de una presumible totalidad. El acercamiento metodológico realizado -a partir de entrevistas, observación de campo y registros hemerográficos de diversas investigaciones convergentes- establecen las claves analíticas sobre los mecanismos de intervención y gestión impulsados por el Estado provincial, focalizando en el denominado “Proyecto de Urbanismo Colaborativo con perspectiva de género”. Teniendo en cuenta la relevancia del avance progresivo de las dinámicas urbanas en consonancia con el carácter extractivo del capital circulante, debatimos entonces la tensión entre lo vivido/planificado (“espacio habitado/concebido”), eje de reflexiones del pensamiento clásico de lo “urbano” referente a las heterogéneas modalidades de producción espacial. En este marco, las pugnas por el “derecho a la ciudad” son tensionadas con un abanico de repertorios que incluyen a las prácticas subalternas. En este caso, la promesa de la “integración urbana” recobra un especial interés a partir de políticas urbanas que producen espacio a partir de la proyección de un ideal urbanístico que no sutura la persistencia de crecientes núcleos internos de pobreza y marginalidad, y en su lugar promueve una acciones de intervención estratégica que consagran la interpelación al sueño de la inclusión y la fantasía del bienestar futuro.