Registros climáticos en depósitos aluviales cuaternarios, Sierras Australes de la provincia de Buenos Aires.

GIL, VERÓNICA; ASENSIO, MARCOS; CAMPO, ALICIA MARIA

Buenos Aires

Congreso; XII Reunión Argentina de Sedimentología.; 2008

Asociación Argentina de Sedimentología (AAS)

El reconocimiento de cuatro niveles estratigráficos asociados a procesos de remoción en masa en el sector del Abra de la Ventana (38º 08´ S; 62º 00´ O) pudieron ser correlacionados con diferentes unidades estratigráficas del Sur de la provincia de Buenos Aires. Esta correlación sumada a las características primarias de los depósitos aluviales (litología, suelos, color, extensión) permitió que puedan hacerse inferencias de las distintas condiciones climáticas imperantes durante el Cuaternario de la región. Los diferentes niveles han sido enumerados de base a techo teniendo en cuenta su disposición estratigráfica. El nivel 1 se apoya en discordancia sobre el basamento cristalino (Rocas Paleozoicas) y alcanza un espesor de 10 metros. La litología de dicho nivel se compone principalmente por loess. La geometría de los cuerpos básicamente es lobular. Se reconocen dentro del mismo algunos niveles lenticulares de conglomerados cuarcíticos, al techo niveles edáficos con horizontes petrocálcicos y no se observa estratificación. El nivel 2 se apoya en discordancia erosiva sobre el nivel 1. Son conglomerados principalmente de cuarcita con cemento ferruginoso, fábrica clasto sostén y un arreglo granocreciente. Tienen mayor extensión areal y el espesor no supera los 3 m. Estos cuerpos presentan geometría lobular. El nivel 3 se encuentra poco desarrollado y se destaca por la presencia de suelos orgánicos y en algunos sectores reptación de los mismos. Por último el nivel 4 que disecta a los infrayacentes y se caracteriza por retrabajar los depósitos preexistentes. Este nivel es el más conspicuo ya que engloba el desarrollo de los suelos y las redes de drenaje actuales. Dadas las características del nivel 1 se puede inferir que su desarrollo estuvo relacionado a periodos de aridez (tosca) dada la falta de desarrollo de estructuras sedimentarias que indiquen corrientes de agua libre y el desarrollo de horizontes edáficos petrocálcicos. El nivel 2 refleja condiciones de mayor humedad y temperatura, dado que los depósitos se asociarían con sistemas de dispersión clástica de alta eficiencia permitiendo la buena selección del material (conglomerados clasto sostén) y la cementación por hierro de los mismos. El tercer nivel estratigráfico se interpreta como desarrollado bajo un clima húmedo periglacial. Estas condiciones son inferidas a partir del desarrollo de suelos con horizontes orgánicos (preservación de la materia orgánica) y la reptación de los mismos. El último nivel se destaca por la incisión de nuevas redes de drenaje dentro del paisaje, asociándose a un mejoramiento climático. A partir de estas observaciones es que se puede intentar establecer una correlación con las unidades previamente descriptas para la región Sur de la provincia de Buenos Aires. El nivel 1 sería correlacionable con la Formación Saavedra (Rabassa, 1989). Así, este nivel se compone por loess y la formación de horizontes edáficos petrocálcicos. El nivel 2, en la zona de divisorias, se correlacionaría con la Sección Superior de la Secuencia Agua Blanca (Zavala y Quattrocchio, 2001), la cual tuvo su desarrollo en los valles fluviales de la región durante el Holoceno medio. El nivel 3 podría relacionarse con la Pequeña Edad de Hielo, 440 años. (Deschamps, 2003). Por último el nivel 4 se asociaría a un mejoramiento climático y a un incremento en las precipitaciones por influencia del cordón serrano a partir de una mayor exhumación del relieve en el área de cabecera. Estas condiciones favorecerían las precipitaciones orográficas locales.