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La aprobación de la ley nº 26.150 que creó el Programa Nacional de Educación Sexual Integral en octubre del 2006, generó grandes polémicas en la comunidad católica y una fuerte oposición que continúa vigente. Para dejar en claro su postura y, al mismo tiempo, dar una respuesta a los fieles, la Conferencia Episcopal Argentina presentó su propio plan de trabajo en el texto Educación para el amor (Buenos Aires: Oficina del Libro, 2007) dirigido a directivos, docentes y padres. Aunque esta guía fue vista como una iniciativa novedosa, no era la primera vez que la Iglesia avanzaba en este tema. Desde fines de la década de 1960, había intentado presentar lineamientos precisos que definieran los alcances y limitaciones de la educación sexual, mientras las editoriales católicas publicaban una importante cantidad de textos de autores nacionales y traducciones - que buscaban facilitar y unificar la tarea de sacerdotes, educadores y familias. Al mismo tiempo, no fueron pocas las escuelas católicas, las parroquias y las instituciones laicas que, buscando responder a una demanda social que podía ser satisfecha por divulgadores del mundo médico y de la psicología, defendieron su lugar como asesores espirituales con escritos y programas de acción concretos. En esta ponencia reviso algunas de estas experiencias situándolas en sus contextos de producción y recepción, en el período que va desde fines de los años 60 hasta la actualidad. Para ello analizo documentos oficiales, textos publicados por editoriales católicas durante las últimas tres décadas y entrevistas a informantes claves que dan cuenta de las acciones desarrolladas en el campo de la educación sexual en la historia argentina reciente.

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