IHUCSO LITORAL   26025
INSTITUTO DE HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES DEL LITORAL
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Economía y castigo. Una perspectiva interseccional sobre el trabajo de las mujeres privadas de su libertad en la unidad penitenciaria n° 4 de la ciudad de Santa Fe
Autor/es:
NAVARRO LORENA; D' AMELLIO CAROLINA; TABOGA JULIETA; CLAUS WALDEMAR
Lugar:
Santa Fe
Reunión:
Encuentro; IV Encuentro de Investigación sobre Problemáticas de Género; 2017
Institución organizadora:
Secretaría de Extensión- Programa Género, Sociedad y Universidad (UNL) Secretaría de Ciencia y Técnica (UNL)
Resumen:
El presente trabajo tiene como propósito describir y analizar el escenario laboral de la unidad penitenciaria n° 4 de la ciudad de Santa Fe desde una perspectiva de género. El vínculo entre trabajo y encarcelamiento ha acompañado a la prisión moderna desde sus inicios. Siguiendo a Sozzo (2009), desde el siglo XVIII, la pena privativa de la libertad se instaló como la forma de castigo ?moderna? por antonomasia, aun cuando de modos y en tiempos diversos, en distintos escenarios culturales. En el contexto de la modernidad penal, el encierro como castigo legal estuvo ligado a una finalidad utilitarista: la ?corrección? del ?delincuente?. Esta finalidad utilitarista ha sido reconstruida con diferentes argumentos discursivos provenientes de diversos campos de saber ?modernos? ?de la filosofía al derecho, de la medicina a la sociología- : ?readaptación social?, ?rehabilitación social?, ?resocialización?, ?reinserción social?, etc. Ahora bien, el logro de esta finalidad correccionalista descansó en el desarrollo de un conjunto de dispositivos que terminaron por constituir ?una serie de ensambles de discursos y prácticas ?normalizadores?, ?disciplinarios? o ?correccionales? que buscan moldear la vida secuestrada? (Sozzo, 2009: 34). Uno de estos ensambles se vinculó y se vincula con el rol del trabajo como instrumento de corrección del ?delincuente?. En efecto, desde este punto de vista ?se presume que [el trabajo] instaura hábitos regulares, evita el ocio y la posibilidad que nace de este de la aglomeración que genera desórdenes y conflictos, entrena en el acatamiento de órdenes y en el respeto de una jerarquía y prepara desde el punto de vista de las habilidades y capacidades, pero también ? y aún más esencialmente ? desde el punto de vista de los deseos y aspiraciones para un futuro trabajo asalariado en el cuerpo social, luego de la liberación?(Sozzo, 2009: 35).Ahora bien, es necesario poner frente a esta historia del vínculo entre trabajo y encarcelamiento, las diversas declinaciones que ha tenido el mismo en el caso del encarcelamiento femenino. En efecto, y siguiendo a Guala (2016), tanto las imágenes de la criminalidad femenina como las nociones a partir de las cuales se entendió su ?corrección?, pero también los dispositivos ideados para ello y los escenarios institucionales en los que desplegaron, tuvieron marcadas diferencias con las correspondientes al encarcelamiento masculino. En este sentido, fue la criminología feminista la que introdujo ?de forma definitiva el análisis del encarcelamiento de mujeres en la agenda académica?, tomando como punto de partida ?los vínculos entre los regímenes de control de las instituciones de encierro y el régimen de género vigente en un contexto social determinado? (Guala, 2016: 50).Entonces, vamos a analizar la articulación entre género, encarcelamiento y trabajo partiendo de estas referencias, utilizando una serie de investigaciones realizadas en el contexto local (Pereson, 2015; Guala, 2016), y desde una perspectiva interseccional. Esta última surge en el contexto del desarrollo de la tercera ola de feminismos, ?que apostaba por la introducción de otros vectores de opresión diversos y múltiples a los señalados por el momento anterior? (Iglesias Skulj, 2013:93). En este sentido los análisis interseccionales parten de una definición multifacética de opresión, que considera el modo en que diversos vectores o sistemas de poder ?estructurados en torno a nociones y relaciones de género, raza y clase- se solapan, entretejen y actúan simultáneamente, constituyendo determinadas matrices de dominación y produciendo experiencias de opresión, pero también formas de agenciamiento y resistencias, múltiples. En su uso en el campo de la criminología, ?este discurso?explica cómo la clase, la raza ?la edad y la sexualidad- construyen lo normal y lo desviado, la forma en la cual estas desigualdades exponen a determinados sujetos a la desviación o la delincuencia, así como los modos en que la ley y las instituciones desafían y reproducen esas condiciones de partida? (Iglesias Skulj, 2013: 94).Partiendo de las referencias antes mencionadas, el presente trabajo intenta contribuir a la descripción, análisis y crítica del modo en que se desarrolla este vínculo actualmente en un escenario particular: la unidad penitencia n°4 de la ciudad de Santa Fe. Con dicho objetivo nos centraremos en tres dimensiones que aislamos a partir del trabajo de campo: 1-Por un lado vamos a hacer foco en las nociones de rehabilitación que sostienen los agentes del servicio penitenciario de santa fe que se desempeñan en ese espacio y el tipo de control sobre las mujeres detenidas que estas concepciones habilitan; 2- Asimismo vamos a considerar la oferta y el funcionamiento de los destinos laborales en la unidad, que relegan a las mujeres detenidas a actividades de limpieza y de cuidado o cocina, reproducen estereotipos tradicionales de género y que, atento a las realidades del mercado laboral, refuerzan también inserciones laborales precarias de mujeres por lo general de escasos recursos; 3-Por último nos centraremos en la importancia de los ingresos obtenidos a través del trabajo en la cárcel para el sostenimiento de los hogares, en el marco del proceso definido como de feminización de la pobreza. De esta manera, como se consigna en el informe ?Mujeres en Prisión? elaborado por el CELS, ?es posible aseverar que el aumento de la población penitenciaria femenina se produjo en el marco de procesos de empobrecimiento y desempleo propios de la década de 1990, que tuvieron un impacto diferenciado en las mujeres y coincidieron con transformaciones de las estructuras familiares que significaron mayores responsabilidades para ellas como cabeza de familia. Por lo tanto, puede afirmarse que estas situaciones debieron de influir en la búsqueda de nuevas estrategias de supervivencia, en especial por parte de las mujeres de escasos recursos? (CELS, 2011: 28), y pueden servir para comprender estas estrategias no solo en los momentos previos sino también durante la situación de encarcelamiento.El presente trabajo es resultado de una actividad de monitoreo sobre el trabajo carcelario en las Unidades Penitenciarias Nº 2 y 4 de la ciudad de Santa fe durante el segundo semestre de 2015 y el segundo semestre de 2017, en el marco del Proyecto de Extensión e Interés Social ?Observatorio Prisión y Derechos Humanos. Mecanismos de monitoreo de privaciones del encarcelamiento orientadas a la reducción de daños?. El mismo tuvo como objetivo reconstruir el escenario laboral de ambas prisiones atendiendo principalmente a las experiencias de las personas privadas de su libertad y de los operadores del servicio penitenciario sobre las distintas actividades laborales ofrecidas en las mencionadas instituciones. Para la presente ponencia, rescatamos la porción del trabajo de campo realizada en la UP Nº 4, que consistió en la realización de un total de 12 entrevistas a personas privadas de su libertad y otras 12 con personal penitenciario afectado ? en diversas modalidades ? a destinos laborales.