IECH   26002
INSTITUTO DE ESTUDIOS CRITICOS EN HUMANIDADES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Ética cínica y sabiduría animal en las crónicas de Hebe Uhart
Autor/es:
YELIN, JULIETA
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Congreso; II Congreso Internacional de Debate en torno a los Demás Animales ?Hacia la construcción de mundos no especistas?; 2019
Institución organizadora:
Centro de Investigaciones y Estudios sobre Cultura y Sociedad (CONICET y Universidad Nacional de Córdoba)
Resumen:
La escritura de Hebe Uhart ha estado consagrada, casi por entero, a la vida de los otros. Entre esos otros están, de un modo bastante persistente a lo largo de toda la obra, y con mayor intensidad hacia el final, los animales. Animales es, precisamente, el título del último libro que Hebe Uhart publicó antes de morir. En él se relatan las andanzas de una escritora curiosa por territorios de la vida humano-animal -zoológicos, plazas urbanas, programas televisivos, casas de familia, etc.-. La narradora observa, pregunta, escucha y después discurre, como probablemente lo hacían los filósofos en Roma o en Atenas hace aproximadamente veinte siglos, sobre diversos asuntos de interés público: la diferencia ontológica entre perro de calle y perro de casa, el afán pedagógico de los amos, la inteligencia de tal o cual ave, los diferentes modos que existen de domar a un caballo. También, como los antiguos filósofos callejeros, se propone mirar de cerca el acontecer de esas vidas y, exponiendo actitudes, comprotamientos y costumbres, dar forma a un arte de vivir y a un estilo. El yo narrativo austero, que Uhart sostiene a lo largo de toda su obra, asume en estos textos un talante filosófico, afín al perfil ético de los antiguos cínicos, abocado al juego de divergencia y verdad que nace de la preocupación por las cosas y los seres cercanos. El afán incansable de hacer y de hacerse preguntas da cuenta de ese modo de estar inclinada hacia los otros y hacia lo otro: allí donde hay algo con lo que no es posible identificarse plenamente se activa el mecanismo de pensamiento que importa a la práctica artística como forma de sabiduría: el de hacer familiar lo extraño y el de encontrar lo extraño en lo más familiar.