Las feministas ante la cuestión de la igualdad. Un dilema sin zanjar

VELA LILIANA

Sujetos Sociales y educación en Argentina hoy.

UNJU

Lugar: Jujuy; Año: 2001; p. 201 - 214

La cuestión de la igualdad para las feministas sigue siendo dilemática. Los aportes más actuales desde el campo de la epistemología sostienen que ya no cabe la posibilidad de considerar las regularidades que dieran certidumbre al conocimiento científico de la modernidad. Hoy en cambio, los nuevos procesos en las prácticas culturales dan lugar a bifurcaciones y por lo tanto, a una variedad de elecciones cuyos resultados son imposibles de arriesgar. Pero ¿qué grado de libertad tienen las mujeres en sus elecciones?. Desde el campo de la teoría política se sostiene que la clásica concepción de igualdad sólo incita a la traición en tanto la distribución de poder en los grupos humanos es inevitable. Michael Walzer considera que la política es el espacio desde donde ese poder puede ser restringido si se distribuye ampliamente y denomina a esta forma de igualitarismo "igualdad compleja". Hombres y mujeres para M Walzer pueden modelar su propio destino. Sin embargo para las mujeres el camino no está allanado, tanto en el campo de la práctica como de la política. Modelar su propio destino es un objetivo privilegiado, no obstante, pueden apreciarse las dificultades para alcanzarlo en cuanto se consideran los procesos sociales y las condiciones históricas de dominación en las cuales las mujeres vienen intentando el logro de su autonomía. Por el momento, para algunas feministas como François Collin, las energías deben orientarse, más que a las elaboraciones teóricas, a una praxis transformadora de las relaciones entre los sexos, que tienda a eliminar la dominación. Sólo entonces cabría pensar en la posibilidad de que el colectivo de mujeres pudiera modelar su destino.