Relatos de piedra sobre las chullpas qhuntu de Jesús de Machaca

LUIS SALVADOR ARANO ROMERO

La Paz

Congreso; XXXII Reunión Anual de Etnología; 2018

Museo Nacional de Etnografía y Folklore

En Jesús de Machaca, al igual que en diferentes comunidades en el altiplano, existe una conexión profunda entre el entorno y el ser humano. Este entorno es un tramado complejo de materialidad y subjetividad, que entreteje un mundo de creencias que los pobladores locales tienen con todo aquello que los rodea. El mundo material y el mundo de las ideas, sumidas en un entorno específico, logran crear diferentes perspectivas sobre un hecho específico, por lo tanto, existen diferentes formas de ver el mundo, y al mismo tiempo interpretarlo.En las diferentes temporadas de campo, tanto arqueológicas como etnográficas, llevadas a cabo desde el año 2012, hemos logrado evidenciar como este entorno es percibido e interpretado por los comunarios. Al mismo tiempo debemos entender que, dependiendo el rango etario y las costumbres adquiridas, las interpretaciones obtenidas son diferentes, generando una dinámica compleja en las concepciones del espacio.Este tejido de interpretaciones se presenta en diferentes ámbitos y tipos de materialidad. En este trabajo se propone ver cómo el pensamiento de los pobladores locales otorga una interpretación a los contextos arqueológicos, enfatizando en aquellos que incorporan el material lítico. Específicamente tomaremos en cuenta a las chullpas qhuntu. En una traducción literal estaríamos hablando de entierros o tumbas en montículos, puesto que chullpa significa entierro y qhuntu refiere a una elevación en la tierra. Sin embargo, en varias comunidades del municipio es el nombre genérico que los pobladores locales le otorgan a diferentes tipos de sitios arqueológicos o aquello que consideran antiguo.Desde montículos hasta grandes cementerios, las chullpas qhuntu han ido modificando el paisaje de Jesús de Machaca a partir de las distintas interpretaciones que se les ha otorgado. Casi siempre asociadas con la muerte, con el pasado y con los abuelos, su preservación y/o destrucción ha ido ligado con las distintas ideologías de los pobladores locales. Sin duda alguna, más allá de las características formales de cada sitio y la materialidad asociada, los bloques de roca terminan por definir a estos sitios. La arenisca, sacada de las canteras de la serranía de Jesús de Machaca, posee una connotación simbólica importante: es considerada fuerte, muy antigua y domesticada por los abuelos. En general, un 80% de los sitios arqueológicos denominados en el acervo local como chullpas qhuntu presentan en su conformación bloques de arenisca que varían en forma, tamaño, situación y contexto. Muchos de los sitios bajo esta denominación están conformados por una hilera de bloques de arenisca, los cuales presentan plantas circulares, cuadrangulares y rectangulares. Para los pobladores locales el hecho que tengan piedras significa una especie de protección, ya sea para el vivo, como para el muerto. Las piedras estarían asociadas a una especie de ?prisión? para que el muerto no pueda salir a espantar a las personas y al ganado. Pero también significaría un muro para que el vivo no se interne en el mundo de los muertos y contraiga el ?mal de chullpa?. Por el contrario, los que no presentan piedras ya estarían ?domados? por lo que no generarían peligro alguno si el ser humano tiene contacto con ellos.