Diferentes fuentes y formas de suministro de forraje en terneros de crianza

BRUNETTI, M. A.; RATTALINO, D.; FROSSASCO, G. P; MOLINA,M.G.; SCORCIONE TURCATO, M.C.; PALLADINO, R.A.; JUAREZ, I; FERRER, J. MARTÍNEZ

Córdoba

Congreso; 40° Congreso Argentino de Producción Animal (AAPA).; 2017

IntroducciónExisten contradicciones sobre la inclusión o no de forraje (FORR) en la dieta de crianza. Si bien la recomendación usual es ofrecer heno de alfalfa desmenuzado de muy buena calidad nutricional, en bajas cantidades, varias investigaciones internacionales recientes han encontrado que proveer heno o rastrojo picado de gramíneas mejora la respuesta animal. El objetivo de este trabajo fue generar información local sobre el efecto de proveer diferentes fuentes y formas de FORR al 10% de la dieta sólida (DS) sobre la respuesta animal y digestibilidad en terneros de crianza.Materiales y MétodosUn total de 28 terneros Holando (38,6 ± 7,2 kg de PV) ingresaron a los 2-3 d de vida, a un sistema de crianza artificial individual (EEA INTA Manfredi). Inmediatamente, fueron asignados al azar a uno de los tratamientos (TRAT): con suministro de heno de alfalfa picado (THA), pellet de alfalfa (TPA), heno de rastrojo de trigo picado (TRT) o sin FORR (TSF). La dieta líquida consistió en 2 tomas de 2 L de sustituto lácteo al 12,5% de sólidos, hasta los 50 d de vida. Luego, se redujo a una sola toma hasta el desleche (54 d). En tanto, la DS estuvo conformada por alimento balanceado (BAL) más FORR (según TRAT, al 10% de la DS), en comederos separados (Cuadro 1). A partir del d 14 de crianza, se evaluó consumo de materia seca diaria (CMS), aumento diario de peso vivo (ADPV), altura a la cruz (ALT) y conversión alimenticia (CA; kg ADPV/kg CMS) semanal. Al d 60 ± 3, la digestibilidad aparente (DA) de MS, MO, PB, FDN y FDA fue determinada mediante recolección de la totalidad de las excretas sólidas durante 4 d. Inmediatamente después, se determinó el pH del líquido ruminal por ruminocentesis dorsal antes del suministro de la ración.Cuadro 1. Composición de los alimentos suministrados.Los datos se analizaron mediante análisis de la varianza. Para variables con mediciones repetidas en el tiempo se recurrió a modelos lineales generales y mixtos. Se utilizó como covariable el PV inicial para las variables CMS y ADPV, y altura inicial para ALT. Las medias se compararon mediante el test LSD Fisher (α ≤ 0,05).Resultados y DiscusiónNo existieron diferencias en CMS de BAL ni DS. Aunque, los TRAT con suministro de FORR tendieron (p=0,052) a presentar un mayor CMS de DS (0,72 vs 0,58 kg/d). La relación CMS FORR/DS resultó levemente inferior a la planificada, pero similar entre TRAT (THA= 9,4 ± 3,3; TPA= 8,6 ± 3,1 y TRT= 7,6 ± 3,6%).El ADPV no difirió, aunque numéricamente fue inferior en el TSF durante toda la crianza (525 vs 595 g/d; Figura 1). Tampoco se detectaron diferencias en ALT, CA y pH ruminal. Este último, presentó su valor más bajo en TSF (5,75) y el más alto en TRT (6,24), donde más del 50% de las partículas quedaron retenidas en el tamiz superior (? 20 mm). La DA de MS, MO, FDN y FDA fueron similares entre TRAT, excepto en PB donde la DA tendió a ser menor en el TSF (62,8 vs 68,5%; p=0,081). Además, se registró una tendencia de mayor DA de la FDN en los TRAT con acceso a FORR (39,1 vs 32,5%; p=0,075).ConclusionesLa provisión de forraje al ≈10% de la DS no produjo un beneficio significativo en la respuesta animal. Sin embargo, tendió a mejorar el CMS, ADPV, pH ruminal y DA, lo cual debería verificarse con un número mayor de terneros.12001100100090080070060050040030020010014 21 28 35 42 49 56Día de ensayoFigura 1. Aumento diario de peso vivo a lo largo de la crianza (Referencias: THA= tratamiento heno de alfalfa; TPA= tratamiento pellet de alfalfa; TRT= tratamiento heno de rastrojo de trigo; HSF= tratamiento sinacceso a forraje. Las barras indican error estándar).1SL=sustituto lácteo; BAL= alimento balanceado; RT= heno de rastrojo picado de trigo; HA= heno picado de alfalfa; PA= pellet de alfalfa.