Montañas sagradas, espíritus Kachina y arte rupestre en las mesetas de los Hopi

CONSTANZA CERUTI

San Miguel de Tucuman

Simposio; VIII Simposio Internacional de Arte Rupestre; 2010

IAM- UNT / ISES - CONICET - UNT

El presente trabajo, de interes comparativo para los estudios sobre montañas sagadas andinas, explora la relación del arte rupestre de los nativos americanos Hopi con la geografia sagrada de la region sudoeste de los Estados Unidos, en particular con el pico San Francisco y los espíritus Kachina que moran en dicha montaña. El arte rupestre de los nativos americanos Hopi y el de sus ancestros Anasazi debe ser comprendido atendiendo al contexto geográfico y cultural que le otorga su dimensión simbólica y su significación social. En la realización de esta investigación, la autora ha observado personalmente los petroglifos en las alturas de la meseta de Mishongnovi y el campo de petroglifos junto a las ruinas de Wupatki, habiendo participado asimismo de la danza del búfalo en la Segunda Mesa Hopi y de entrevistas a los pobladores locales. El sistema de creencias Hopi atribuye un papel preponderante al monte sagrado San Francisco y a los espíritus Kachinas que allí residen durante una aprte del año, tras visitar las comunidades y encarnarse en sus danzarines enmascarados y muñecas de madera en miniatura. Los petroglifos con motivos de nubes, altares de nubes y danzantes enmascarados aluden directamente al papel vital cumplido por los Kachina en la subsistencia indigena, al ser los espíritus de la montaña los encargados de traer hacias las mesetas de los Hopi la nieve y las lluvias que hacen posible el ciclo agrícola en un entorno árido y desértico. Los petroglifos representando emblemas de clanes Kachina hacen referencia a la particular organización social de los Hopi, en la que los diferentes clanes canalizan el culto en distintas kivas, compartiendo colectivamente las danzas mediante las cuales se honra, representa, invoca y despide a los espíritus de la montaña en sus visitas anuales a los poblados en las mesetas. Algunos clanes Hopi conservan la práctica de peregrinajes hacia la montaña sagrada San Francisco, morada de los Kachina, a la cual solamente los ancianos instruidos pueden ascender. Siglos atrás, el fenómeno Kachina fue en parte responsable del súbito despoblamiento de los centros Anasazi y de las migraciones ancestrales de los Hopi hacia su actual territorio.