Rol de los lípidos mayoritarios de Brucella abortus en la interacción con el huésped

BUKATA, L.; SILVIA ALTABE; DIEGO DE MENDOZA; UGALDE, R. A.; DIEGO JOSE COMERCI

Rosario Santa Fé

Congreso; Jornadas de Lípidos; 2008

Una de las características peculiares del patógeno intracelular Brucella abortus es la composición lipídica de su membrana, la cual contiene FosfatidilEtanolamina (FE), FosfatidilColina (FC) y Lípido de Ornitina (LO) (aprox. 30% de c/u). A través del análisis genómico de B. abortus 2308 y la construcción de mutantes identificamos los genes relacionados con la síntesis de estos lípidos y estudiamos su efecto en la interacción con el huésped. A diferencia de otros procariotas, la síntesis de FC no procede por medio de la metilación de FE sino a través de la condensación de colina con CDP-DAG en un paso catalizado por FosfatidilColina Sintasa, lo que sugiere que este parásito intracelular capta colina del huésped. Si bien la ausencia individual de alguno de los tres lípidos mayoritarios no afectó la viabilidad de la bacteria, los experimentos de “vector shuffling” indicaron que la presencia de al menos uno de los dos fosfolípidos zwitteriónicos (FE y FC) es esencial para Brucella. Notablemente, sólo la ausencia de FC o FE afectan distintas características relacionadas con la virulencia de la bacteria, como la formación de la vacuola replicativa intracelular o el establecimiento de infecciones crónicas duraderas. En particular, el defecto que muestran las mutantes en la FosfatidilSerina Sintasa (pssA) en la capacidad de evadir la degradación en la vía endocítica y en la formación de la vacuola replicativa derivada del retículo endoplásmico indica que FE juega un rol importante en estos procesos. El análisis proteómico comparativo de la membrana de las mutantes muestra alteraciones en el contenido de aproximadamente 40 proteínas, en general porinas y algunos reguladores de respuesta, que podrían explicar los defectos en el proceso de interacción con el huésped. La envoltura celular de Brucella presenta un contenido estable de LO (20-30%) el cual no se modifica en condiciones limitantes de fosfato o nitrógeno. Si bien su ausencia no afecta la viabilidad o la capacidad de invadir y proliferar en las células del huésped, la similitud estructural que posee con el lípido A del LPS sugiere que el mismo podria participar en la modulación del sistema inmune, hipótesis que actualmente estamos testeando