INVESTIGADORES
LIDA Miranda
congresos y reuniones científicas
Título:
De la guerra civil española a la guerra fría, a través de los epistolarios transatlánticos (España- Estados Unidos- Argentina) de Américo Castro, Amado Alonso, Pedro Salinas y Jorge Guillén)?
Autor/es:
LIDA, MIRANDA
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Workshop; Articuladores culturales entre guerras y paz América Latina, Estados Unidos y España, 1846-1945; 2016
Institución organizadora:
Universidad Torcuato Di Tella
Resumen:
Amado Alonso abandonó España en tiempos de Primo de Rivera, y se radicó por un cuarto de siglo en la Argentina, donde dirigió el Instituto de Filología de la Universidad de Buenos Aires hasta 1947, cuando pasó a Estados Unidos; Américo Castro, Pedro Salinas y Jorge Guillén lo hicieron ya en plena guerra civil, y se refugiaron en diferentes instituciones académicas de los Estados Unidos. Se mantuvieron en estrecho contacto entre sí, y a su vez tuvieron contactos en común con otros intelectuales que o bien permanecieron en España, o bien buscaron refugio en otras latitudes. Los epistolarios cruzados de los cuatro se pueden reconstruir fragmentariamente, si bien en porciones significativas, a través de los archivos personales de Américo Castro, Amado Alonso y Pedro Salinas, depositados tanto en los Estados Unidos como en España. Los cuatro compartieron la experiencia del exilio en tiempos de dictadura, guerra civil y franquismo y tuvieron gestos de solidaridad para con quienes se quedaron; tuvieron además que sortear incontables dificultades para insertarse profesionalmente en los países que los acogieron (Argentina y Estados Unidos), puesto que no abandonaron la expectativa de rehacer sus carreras académicas, intelectuales y literarias, aún en tiempos de guerra mundial. La distancia fortaleció los vínculos, los valores y las convicciones en común. Además, ya en el exilio los cuatro, se solidarizaron con quienes quedaron en España, como Dámaso Alonso, Ramón Menéndez Pidal y otros investigadores del Centro de Estudios Históricos, con el que tanto habían tenido en común los exiliados que aquí estudiaremos. De hecho, una vez instalados todos ellos en Estados Unidos, y favorecidos por la recuperación de la segunda posguerra, lograron facilitarles a varios investigadores españoles e hispanoamericanos que se instalaran en las universidades norteamericanas, ya sea para realizar estancias de investigación, el dictado de cursos, etc. De esta manera, los estudios hispánicos se fortalecieron, difundieron y prestigiaron a la larga en el seno de la academia norteamericana.