Propuesta de un índice de dependencia económica, mediante datos censales

GUILLERMO A. VELÁZQUEZ; FERNANDO A. MANZANO

Foz do Iguaçu.

Congreso; VII Congreso de la Asociación Latinoamericana de Población y XX Encontro Nacional de Estudos Populacionais; 2016

Asociación Latinoamericana de Población

La relación de dependencia demográfica es una medición de la carga de dependencia demográfica de gran difusión en los boletines de estadística. Las definiciones sobre este indicador se limitan a explicitar solo su forma de cálculo, fundamentada en un criterio de carácter biológico, que establece que todas las personas entre 14 y 64 años inclusive son potenciales activos, mientras que las restantes edades se consideran potencialmente inactivas o dependientes. Suele considerarse que un descenso del valor de este indicador se considera una situación favorable para potenciar la actividad económica. Desde la teoría neoclásica se ha sostenido que un aumento de la población joven ?un incremento de la relación de dependencia demográfica de los jóvenes?, iba en detrimento del aumento del ahorro (Coale y Hoover, 1958 y Leff 1969). Estudios de carácter empírico han avalado esta relación negativa (Mason y Fry 1982). Sin embargo otros autores, entre los que se encuentran Goldberger (1973), Ram (1982) y Deaton (1992) no han confirmado esta hipótesis, poniendo en duda la validez de los métodos empíricos empleados. Dentro del ciencias demográficas, Chackiel (2000) ha propuesto dos índices adicionales: la relación de dependencia efectiva (que considera como potenciales activos no sólo a las personas en edad de trabajar, sino a las personas que se encuentran vinculadas al mercado laboral, es decir, a los ocupados o los que buscan empleo activamente), y la relación de dependencia ?real? (la población activa son sólo las personas ocupadas, toda la población restante son dependientes ?inactivos o desocupados?). Las comparaciones entre los resultados empíricos de estos indicadores demuestran una subvaluación de la carga real de dependencia económica. Apoyamos la perspectiva de los autores que remarcaran la necesidad de considerar el hogar como unidad de análisis, debido a que el uso de información a nivel población conduce a resultados erróneos, lo que suele denominarse como efecto ?desmembramiento poblacional?. La propuesta de un índice de dependencia económico a nivel de hogares, busca corregir en parte las deficiencias de los índices de dependencia demográfica que se han propuesto hasta el momento. Se trata de una medición complementaria, que recoge información de todos los miembros del hogar (consumos equivalentes, empleo, discapacidad, jubilación), diferenciando entre tamaño y composición de todos los hogares, que utiliza como insumos los censos nacionales de población.