Inferencias tróficas en mamíferos terrestres del Eoceno de Antártida

GELFO J. N.; REGUERO, M.

Ushuaia

Congreso; I Congreso Científico Provincial sobre Antártida; 2022

El conocimiento de los mamíferos terrestres que formaron parte de los ecosistemas continentales del Eoceno del Continente Antártico se limita a las inferencias realizadas a partir de los restos fósiles de las formaciones La Meseta y Submeseta en la Isla Marambio (Seymour) y por una huella de la Formación Cerro Fósil de la Isla 25 de Mayo (King Jorge). Los grupos representados incluyen formas de una masa corporal inferida de menos de 1 kg, con hábitos tróficos de herbívoros a insectívoros (Gondwanatheria, Dryolestida?, Metatheria); y grupos herbívoros placentarios de entre 10 y 400 kg (Xenarthra, Astrapotheria, Sparnotheriodontidae). Un conjunto de dientes fósiles aislados asignados a mamíferos placentarios incertae sedis, proveniente de las unidades citadas precedentemente, permiten indicar una mayor diversidad de la taxonómicamente registrada de mamíferos herbívoros. El análisis completo de todos los especímenes muestra un predominio de formas ramoneadoras cuya alimentación suele focalizarse en distintas proporciones de hojas, brotes tiernos y frutos. Todas las formas son braquiodontes con bajos índices de hipsodoncia -menores a 0.8-, predominio estructuras bunolofodontes a lofoselenodontes, y en algunos casos desarrollo en el esmalte de bandas de Hunter-Schreger con orientación vertical. Estas características son consistentes con la de mamíferos especializados a ambientes altamente forestados, como aquellos bosques con predominancia de Nothofagus, inferidos para el Paleógeno de la Península Antártica. Se observan diferencias importantes entre los tipos adaptativos de mamíferos herbívoros, conocidos para el Paleoceno y Eoceno de Patagonia. Con la posible excepción de los Xenarthra, no se registran por el momento en el Eoceno de Antártida, formas con una tendencia a la hipsodoncia (e.g. Notoungulata); bilofodontes (e.g. Xenungulata) ni estrictamente bunodontes (e.g. Didolodontidae). Estas comunidades de mamíferos eocenos carecen hasta ahora del registro fidedigno de herbívoros pastadores, omnívoros e incluso un marco más amplio, de formas carnívoras que cubran el nicho de los predadores terrestres. Entre las diversas variables que pueden permitir explicar esta particular estructura trófica se debe considerar el posible carácter local de los registros mencionados, aspectos tafonómicos y paleobiogeográficos.