INVESTIGADORES
HOCSMAN Salomon
congresos y reuniones científicas
Título:
Microfósiles en raederas de módulo grandísimo de contextos agropastoriles del Noroeste Argentino: una contribución a su asignación funcional
Autor/es:
BABOT, MARÍA DEL PILAR; ESCOLA, PATRICIA SUSANA; HOCSMAN, SALOMÓN
Lugar:
Tafí del Valle, Tucumán
Reunión:
Encuentro; Tercer Encuentro de Investigaciones Fitolíticas del Cono Sur; 2005
Institución organizadora:
Instituto de Arqueología y Museo, Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo, Universidad Nacional de Tucumán
Resumen:
Dentro de los conjuntos líticos de sitios agropastoriles del Noroeste Argentino posteriores al 2000 AP, se destaca una clase de artefacto formatizado singular, confeccionado por retalla y retoque unifacial directo (es decir, sobre la cara dorsal de la lasca) que presenta un tamaño considerable, ya que supera los 10 cm de longitud y los 20 cm de ancho (tamaño grandísimo siguiendo criterios de Aschero 1975, 1983).  Estos instrumentos fueron asociados a la denominada ?Industria Basáltica de la Ciénaga? (Menghin 1956) en el área Valliserrana del Noroeste Argentino. Más recientemente, fueron definidas como grandes lascas con retoque por Escola (2000) y, posteriormente, como un subgrupo tipológico dentro del grupo de las Raederas, bajo el nombre de raederas de módulo grandísimo (Babot et al. 2004). Todos los estudios efectuados sobre tales artefactos se centraron en sus características técnico-tipológicas mientras que, hasta el momento, se desconocía su funcionalidad.             En este trabajo se analizan los microfósiles presentes como residuos de uso en dos piezas formatizadas de la clase descripta (Nº 14 y 65) procedentes de la Puna Meridional del Noroeste Argentino. Las mismas fueron recuperadas en el sitio agropastoril Casa Chávez Montículos -Montículo 1- (Olivera 1992), situado en el fondo de cuenca de Antofagasta de la Sierra -3500 msnm-, Catamarca. Se encuentran descriptas en Escola (2000). Asimismo, se consideran para el análisis desechos de talla que pueden ser vinculados con la reactivación de los filos de dichos instrumentos -lascas de reactivación-. Los mismos proceden de un recinto de actividades múltiples de tipo doméstico -Estructura III- del sitio agropastoril PP9.I, situado en sectores intermedios de Antofagasta de la Sierra -3590 msnm-. Estos desechos de talla constituyen los únicos indicadores de las raederas de módulo grandísimo dentro de la Estructura III, ya que en su interior no se han recuperado tales piezas formatizadas. Estas, en cambio, si se encuentran presentes en superficie en espacios extramuros, así como en otras estructuras cercanas dentro del sitio PP9.I. Dado que las lascas descriptas precedentemente constituyen desechos de talla muy característicos, la presencia de este subproducto resultante del mantenimiento puede ser utilizado para inferir la existencia del producto terminado, tanto en contextos agropastoriles puneños como valliserranos (Babot et al. 2004). Teniendo en cuenta las características de los artefactos líticos en estudio, los objetivos del trabajo se dirigieron a: a) aportar al problema del uso de las raederas de módulo grandísimo a partir de dos fuentes artefactuales diferentes: los propios instrumentos formatizados y sus desechos de reactivación. b) controlar la correspondencia entre los artefactos formatizados y los desechos de reactivación, a partir de la comparación de los resultados de sus análisis funcionales. c) obtener información sobre el uso de tales artefactos en muestras procedentes de dos sectores ambientales diferentes dentro del ámbito de Antofagasta de la Sierra, en la Puna Meridional argentina.             La metodología empleada para el análisis de microfósiles corresponde a la descripta en Babot (2004). Se ubicaron las partes activas de los artefactos, constituidas por los filos formatizados y, dentro de éstos, sectores con residuos visibles macroscópicamente, o bien, irregularidades de la superficie como poros, vesículas, grietas y líneas de fracturas producidas por la talla. Dentro de estos sectores se delimitó una zona acotada que fue cepillada suavemente para eliminar el sedimento superficial y posibles fuentes de contaminación postdescarte. Allí se raspó cuidadosamente con un instrumento punzante para separar las partículas de interés de la matriz rocosa, directamente sobre un portaobjetos previamente limpiado. Se reservó el resto del filo para posteriores análisis de rastros de uso. Las muestras se observaron con luz normal y polarizada alternativamente, haciendo barridos completos de una superficie aproximada de 18x18 mm en un microscopio petrográfico. Las observaciones se efectuaron en barridos consecutivos a 200 y 400X para detectar microfósiles de diferente tamaño. Se controló la presencia de contaminación comparando lo observado en las muestras arqueológicas con lo que se encuentra mayoritariamente en muestras de la superficie actual y la estratigrafía del sitio -principalmente microfósiles atribuibles a especies de Asteraceae y Poaceae que crecen en la zona actualmente-.             Los microfósiles documentados incluyen un número reducido de granos de almidón asignables a tubérculos-raíces y, en un caso, compatibles con granos compuestos de quínoa (Chenopodium quinoa) (Babot 2004). El registro de silicofitolitos es muy acotado, y se compone mayoritariamente de partículas irregulares no diagnósticas. Esto es compatible con lo esperable en semillas de pseudocereales y tubérculos o raíces (Korstanje y Babot 2005). Otros microfósiles observados incluyen placas perforadas opacas de sílice, característicos de partes aéreas de especies de Asteraceae y granos de polen afín a dicha familia. Un dato a ser confirmado es la posible presencia de polen asignable a Chenopodiaceae (sensu Markgraf y D?Antoni 1978).             Los fitolitos de calcio se presentaron mayoritariamente en forma de arena cristalina o microcristales. Asimismo se recuperaron frústulas de diatomeas en una proporción importante.             Coincidiendo con el único registro posible de quínoa, se han documentado flóculos de coloración rojiza muy abundantes. Los mismos no parecerían corresponder a pigmentos minerales -óxidos de hierro u otros- ya que presentan birrefringencia al ser observados con luz polarizada. Aun debe ser investigada su posible vinculación con pigmentaciones orgánicas de las semillas de Pseudocereales. Los resultados obtenidos sugieren un posible uso de las raederas de módulo grandísimo en actividades vinculadas con la siega o el procesamiento de especies microtérmicas -quínoa y tubérculos o raíces-, al menos en el ámbito de Antofagasta de la Sierra, de donde proceden los ejemplares analizados. Los microfósiles de Asteraceae -polen- procederían de una introducción contemporánea o posterior al uso de los artefactos que no necesariamente se encuentra vinculada con el empleo principal de los mismos. Esto podría ser coherente con el laboreo en zonas de cultivo. Una segunda etapa de esta investigación aportará información funcional complementaria desde otras dos vías analíticas, el análisis de residuos lipídicos y el análisis de residuos físico-mecánicos. Los datos de este estudio constituyen un aporte para el establecimiento del uso de una clase artefactual muy difundida en los contextos agropastoriles del NOA y aportan al conocimiento de las prácticas culturales de estos grupos prehispánicos, en cuanto a modalidades de procesamiento de recursos. La coherencia entre los artefactos formatizados y los desechos de reactivación analizados, en términos de residuos de uso, permiten vincularlos mutuamente tanto desde lo tecnológico como desde lo funcional. De esto se destaca la posibilidad de obtener evidencias indirectas del uso de las raederas de módulo grandísimo a partir de los desechos de reactivación, cuanto los artefactos formatizados están ausentes en los contextos, ya que las lascas proceden necesariamente de artefactos que fueron usados y luego mantenidos.