IEGEBA   24053
INSTITUTO DE ECOLOGIA, GENETICA Y EVOLUCION DE BUENOS AIRES
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
La importancia de Caracterizar Citogeneticamente los ejemplares para Investigacion y Manejo en Cautiverio
Autor/es:
NIEVES, M; FANTINI L; M.D. MUDRY,
Libro:
Manual de Primatologia Latinoamericana
Editorial:
Soc. Cubana para la Ciencia del Animal de Laboratorio
Referencias:
Lugar: La Habana; Año: 2012; p. 32 - 47
Resumen:
El Orden Primates comprende dos grandes grupos: Strepsirrhini y Haplorrhini. Los Haplorrhini reúnen a los Monos del Viejo Mundo (Catarrhini, Hominoidea) y a los Primates del Nuevo Mundo (Platyrrhini, Ceboidea). Estos últimos, arborícolas, se distribuyen en las regiones de selva desde el sur de México hasta el norte de Argentina. Desde el punto de vista taxonómico, los Platyrrhini se agrupan en tres familias: Atelidae, Cebidae y Pithecidae, todas con una gran diversidad a nivel de especies, historias de vida, ecología, comportamiento y genética (Schneider et al. 1993; Rylands et al. 2006). Independientemente del concepto de especie que se utilice para su análisis y de la forma en que se la identifique, se hace necesario desarrollar trabajos que pongan un mayor énfasis en la protección de la variabilidad, incorporando en el estudio de la diversidad, las adaptaciones locales y/o variantes genéticas (Meffe & Carroll 1994). La antropización y la transformación creciente de los ambientes naturales, provocan una importante retracción o incluso su desaparición. Si bien la caza y el tráfico de animales vivos han tenido gran impacto sobre algunas especies, la destrucción y alteración del hábitat continúa siendo la amenaza más importante para las poblaciones de primates, tanto del Viejo como del Nuevo Mundo. Como consecuencia, muchas especies deben ser rehabilitadas o incluso, criadas y mantenidas en cautiverio a partir de unos pocos individuos, como una forma de fortalecer las poblaciones naturales ya reducidas. La cría en cautiverio, en este sentido, como herramienta valiosa de la Biología de la conservación, puede evitar las consecuencias más irreversibles de estas situaciones críticas como sería la pérdida de la especie (Ojasti & Dallmeier 2000;Ojasti 2000). Los zoológicos han avanzado notablemente en el mantenimiento y reproducción de distintas especies. Sin embargo, mantener poblaciones viables de animales grandes y de manejo complejo, es extremadamente costoso, lo cual restringe esta opción a unas pocas especies de características particulares. En Argentina sería el caso del Cóndor Andino o el Aguará Guazú (Ojasti 2000). Por otro lado, en la cría en cautiverio ya sea con fines de conservación, de investigación o ambas, pueden aparecer cambios genéticos adversos o no deseados con respecto a los objetivos antes planteados: la depresión por endogamia, la pérdida de variabilidad genética y la adaptación genética al ambiente de cautiverio (Frankham 1995). La caracterización taxonómica y el manejo en cautiverio, entonces, deben ser consideradas actividades interdependientes, ya que para mantener un individuo en óptimas condiciones de calidad de vida fuera de su ambiente natural, primero se lo debe identificar correctamente.