IDACOR   23984
INSTITUTO DE ANTROPOLOGIA DE CORDOBA
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Fuegos del pasado. Escenarios ambientales arqueológicos e históricos en las sierras pampeanas a partir del análisis de microcarbones
Autor/es:
HENRIK B. LINDSKOUG; MAIA DI LELLO
Lugar:
San Miguel de Tucumán-Amaicha del Valle
Reunión:
Congreso; VII Congreso Nacional de Arqueometría: Materialidad, Arqueología y Patrimonio; 2018
Institución organizadora:
Centro de investigaciones en Ecología Histórica, Facultad de Ciencias Naturales e Instituto de Miguel Lillo, Universidad Nacional de Tucumán
Resumen:
El fuego, en su paso, modifica el medio ambiente y el paisaje, perturba a los seres que habitan la región, y deja su huella en los sedimentos. También es un factor importante para comprender los ecosistemas forestales modernos. La pedoantracología, disciplina que se concentra en la detección, identificación y fechado de carbón vegetal microscópico presente en los sedimentos, es utilizada en nuestros trabajos con la finalidad de conocer paisajes del pasado, dinámicas de la vegetación y variaciones climáticas observables, ya que cualquier cambio del entorno (sea humano o no humano, intencional o accidental) puede alterar la frecuencia de fuegos. Este tipo de abordaje surge a fines de 1970 basado en los estudios de polen para reconstrucciones paleoambientales (Thinon 1978). En Argentina este método para analizar regímenes de fuego es relativamente reciente, aunque existen abordajes similares relacionados a los estudios de polen. La posibilidad de corresponder datos de eventos de fuego del pasado con estudios arqueológicos y paleoambientales nos permite comprender las condiciones ambientales existentes en sociedades antiguas (Burry et al. 2017; Marconetto et al. 2015), además de que nos posibilita analizar el comportamiento de dichas sociedades en escenarios de incendios (Lindskoug 2016a, b, 2017). En el actual trabajo presentamos los resultados de la aplicación del método desarrollado por Lindskoug (Lindskoug 2015, 2016b; Lindskoug y Marconetto 2018) en tres casos de estudio, que se encuentran ubicados en diferentes lugares de la provincia geomorfológica de las Sierras Pampeanas, región que se extiende al centro-oeste de Argentina:1-Valle de Ambato, localizado al noroeste de las Sierras Pampeanas y caracterizado por un relieve de valles y bolsones, además de depósitos aluviales en el fondo (Blasco et al. 1994), que se encuentra limitando las Yungas y las provincias de Monte y Prepuneña (Cabrera 1976); 2-Cañón de Paclín, ubicado en el valle de Balcosna, que presenta una topografía diversa de valles, lomas y quebradas, alcanzando los 1.200 msnm, y que forma parte de la provincia fitogeográfica de Yungas (Cabrera 1976); 3-Yacanto de Calamuchita, que pertenece al sur de las Sierras Pampeanas, más específicamente a la unidad Sierras Grandes/Comechingones, con pendientes escarpadas al oeste y tendidas al este, que pertenece a la provincia Chaqueña (Cabrera 1976), destacándose las gramíneas ya que supera los 1.300 msnm., aunque en los últimos 50 años el paisaje varió con la inclusión de árboles para la producción maderera (Di Lello 2015).En lo que respecta a investigaciones arqueológicas, el lugar más trabajado es el valle de Ambato, con excavaciones realizadas desde 1970 hasta la actualidad, abordando interrogantes desde diversas perspectivas (Figueroa et al. 2010; Gastaldi 2010; Laguens 2004, 2007; Lindskoug 2016a, b; Marconetto 2008, 2010; Marconetto y Laguens 2017; Pazzarelli 2013; Pérez Gollán y Heredia 1987; Pérez y Heredia 1975). En Paclín las investigaciones son más recientes, enmarcadas en la arqueología del paisaje (Villafañez 2012, 2013). En Yacanto de Calamuchita, por su parte, no se realizaron trabajos arqueológicos ni paleoambientales con anterioridad; si se cuenta con estudios silviculturales para el mejor aprovechamiento de su potencial forestal (Colasanti 2014; Cozzo y Lehmann 1993; Ferchmmin 1969; Mugas y Izurieta 1997).No existe un acuerdo general acerca de las técnicas a utilizar en los abordajes pedoantracológicos, por ello se desarrolló un método propio de extracción, preparación de las muestras y conteo total de microcarbones (Lindskoug 2015, 2016b; Lindskoug y Marconetto 2018), fácil de aplicar, accesible para las características de nuestro laboratorio, adecuado a las condiciones locales y a las preguntas planteadas. Para seleccionar los lugares de muestreo, el criterio fue que estos debían cumplir con el requisito de ser ?trampas? de microcarbones, es decir, atendiendo a las características geológicas del lugar, se eligieron puntos donde la inercia de los ángulos del terreno generaba la expectativa de que los microcarbones movilizados por la erosión eólica y/o mecánica hayan quedado atrapados en un pequeña cuenca, que con el paso del tiempo hayan participado del proceso de sedimentación geológico. Detectados estos puntos procedimos a la extracción de los testigos de sedimento con un barreno (20 mm x 400 mm) de una altura máxima de 3 m. y dividimos la muestra para su recolección. Cada testigo se denominó Estación y las submuestras se distinguieron numéricamente, donde además se consignaron otros tipos de características como las geomorfológicas, tipo de vegetación y la altura de los lugares. En total muestreamos 27 estaciones en zonas que se caracterizan por tener muchos sedimentos fluviales.En el laboratorio el sedimento se montó sin tratamiento en un portaobjeto para su análisis posterior. Para ello tomamos una porción de sedimento, con un peso promedio de 0.0025 gms. Luego, procedimos al análisis con microscopio Motic BA200 con 100x y 200x de magnificación bajo luz transmitida usando una cámara Motic (Moticam 1000, 1.3 megapíxel). El último paso fue realizar un conteo total de los microcarbones de cada muestra, además del fechado a través de AMS de varias submuestras de algunas estaciones de Ambato. Como resultado del conteo total de las estaciones pudimos observar variaciones en los regímenes de fuego a través de la sedimentación geológica. En todos los casos visibilizamos microcarbones en diferentes cantidades, lo que habla de las fluctuaciones de los incendios y el registro generado, así como varios picos que demuestran una mayor frecuencia o intensidad de los fuegos. En relación a la comprensión temporal de cada episodio observado en los sedimentos, el trabajo realizado en el Valle de Ambato contó con fechados radiocarbónicos (Lindskoug 2016b; Lindskoug y Marconetto 2014), y la investigación de Di Lello (2015) se alimentó de documentación histórica de diversas fuentes e información etnográfica. La articulación de todos estos elementos nos permite afirmar que los fuegos forman parte de los escenarios de acción de quienes ocuparon/ocupan las tres áreas. Se vive en un ?paisaje de fuego?, es decir, que en el análisis de estas sociedades debemos considerar tanto los pulsos de incendios forestales como a la gente viviendo e interactuando en ese mundo de fuegos recurrentes, ya sea en sociedades pretéritas como en los grupos actuales. Son importantes los beneficios obtenidos de la aplicación de la técnica pedoantracológica sobre nuestras pesquisas, reconociendo que aún quedan temas por resolver adentro de la disciplina (formas de aplicación, modelos de dispersión, tafonomía, etc.), que podrían enriquecer aún más este tipo de trabajos en el futuro. De todos modos, las preguntas que movilizaban cada una de nuestras investigaciones se vieron respondidas luego de realizar el estudio de microcarbones, y en algunos casos, generaron más cuestionamientos que se verán reflejados en trabajos futuros.