INVESTIGADORES
BILMES Andres
congresos y reuniones científicas
Título:
CONTROLES EN LA EVOLUCIÓN DE LA CUENCA INTERMONTANA PASO DEL SAPO, NOROESTE DE CHUBUT
Autor/es:
JOAQUÍN BUCHER; ANDRÉS BILMES; LEANDRO D´ELIA; MANUEL LÓPEZ; MICAELA GARCÍA; JUAN FRANZESE
Lugar:
Santa Rosa
Reunión:
Congreso; VII Congreso Latinoamericano de Sedimentología y XV Reunión Argentina de Sedimentología; 2016
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Sedimentología
Resumen:
Las cuencas intermontanas se encuentran asociadas a una gran variedad de ambientes tectónicos. Constituyen un caso particular de cuencas sedimentarias, ya que generalmente poseen todas las características necesarias para realizar un análisis dinámico de cómo los factores extrínsecos controlaron su relleno. Son cuencas muy sensibles a los cambios climáticos, tectónicos y de tasa de aporte de sedimentos. La cuenca intermontana Paso del Sapo se ubica en el Antepaís Fragmentado Patagónico y está delimitada por estructuras miocenas contraccionales que generaron la elevación de bloques de basamento. Posee un relleno neógeno mayormente volcaniclástico de origen continental. Esta cuenca constituye un laboratorio natural ideal para analizar la influencia que tuvieron el clima, la tectónica y el volcanismo en el registro sedimentario.El relleno de la cuenca ha sido dividido en dos unidades de acumulación (UA), las cuales serán informalmente denominadas como I y II. La UA-I se encuentra adosada a los márgenes de la cuenca. Está constituida de estratos tabulares y cuneiformes de 0,5 a 2m de espesor que muestran el desarrollo de discordancias progresivas, alcanzando una potencia máxima de 10 m. Se compone de aglomerados matriz sostén masivos que poseen clastos de basamento de hasta 50 cm inmersos en una matriz areno-limosa de composición volcaniclástica. Esta facies posee el desarrollo de horizontes de paleosuelos de colores rosados con desarrollo de cutanes de iluviación, concreciones y estructuras en bloques. Además presenta nidos de escarbeidos y desarrollo de grietas de desecación en las superficies interestatales. La UA-II se encuentra tanto en el centro como en los márgenes de la cuenca, donde cubre incluso a los altos de basamento. Se compone principalmente de bancos tabulares de hasta 3m de potencia y posee un espesor mínimo de 50m. Dominan facies de areniscas y limolitas volcaniclásticas, mal seleccionadas y matriz sostén. En general son masivas, aunque algunas facies poseen lapillis pumiceos que presentan una estratificación entrecruzada planar. Las facies poseen restos de placas de mamíferos y presentan evidencias de procesos pedogenéticos similares a la UA-I pero con menor grado de desarrollo. Se observan cutanes arcillosos, colores gley y presencia de rizolitos. El pasaje entre ambas unidades es transicional, con el desarrollo de una interdigitación que puede alcanzar los 10m de espesor donde intercalan las facies de aglomerados de la UA-I con las facies de areniscas y limolitas tabáceas de la UA-II.La UA-I sugiere una sucesión de paleosuelos desarrollados sobre un material parental mayormente volcaniclástico interpretado como un ambiente aluvial proximal. La presencia de discordancias progresivas y la distribución espacial de los depósitos permite definir a la UA-I como sin-cinemática. La UA-II se interpreta como una sucesión de paleosuelos con menor grado de desarrollo, labrados sobre un material volcaniclástico de variable granulometría, interpretado como ambientes de baja energía de centro de cuenca. En base a la geometría de los estratos y la relación con las estructuras de borde la UA-II es considerada post-cinemática.Las observaciones e interpretaciones de este trabajo permiten analizar en forma preliminar la influencia de los factores extrínsecos en el relleno de la cuenca intermontana Paso del Sapo. La tectónica ha sido muy importante en la generación del espacio de acomodación, y puntualmente en la generación de relieve para el desarrollo de los sistemas aluviales de la UA-I. El clima parece haber sido importante en la generación de los paleosuelos tanto de la UA-I como de la UA-II, condicionando la formación de determinados rasgos pedogenéticos. Por su parte el volcanismo ha sido una fuente de aporte creciente, que alcanzó su máxima influencia en la UA-II. El análisis de los factores extrínsecos revela que han actuado con distinta intensidad a través del tiempo, generando complejos patrones de interacción.En forma preliminar también es posible realizar algunas interpretaciones que vinculen el registro sedimentario, los controles extrínsecos y el tiempo geológico. En este sentido el análisis de los paleosuelos permite interpretar que la UA-II ha tenido un bajo grado de desarrollo de pedogénesis posiblemente por falta de tiempo, lo que indica que la tasa de sedimentación del sistema fue mayor para esta unidad. Esto podría deberse a una elevada tasa de aporte volcánico por sucesivas erupciones que sepultaron los paleosuelos en desarrollo. Por otro lado, los depósitos han sido preservados en gran medida debido a que hubo un espacio de acomodación suficiente para ello. La distribución espacial de las unidades y la relación entre aporte y acomodación, indica un arreglo de facies fuertemente agradacional. Se prevé el desarrollo de actividades futuras que permitan comprender con mayor detalle las interacciones de los factores extrínsecos y la relación entre aporte y acomodación que existió durante la evolución de esta cuenca.