INVESTIGADORES
SAITTA Sylvia Regina
congresos y reuniones científicas
Título:
El viaje argentino de izquierda
Autor/es:
SAÍTTA, SYLVIA
Lugar:
Rosario
Reunión:
Congreso; Congreso Internacional: Cuestiones Críticas; 2007
Institución organizadora:
Centro de Estudios en Literatura Argentina y Maestría en Literatura Argentina, Facultad de Humanidades y Artes, Universidad Nacional de Rosario
Resumen:
El punto de partida del trabajo es el de considerar que, en ciertos períodos de la historia del siglo veinte, la revolución, además de ser un hecho político, social o cultural, se convierte en un lugar determinado en el mapa. A partir de la revolución rusa de 1917, la noción misma de revolución se espacializa, porque desde entonces delimita un territorio y funda un escenario que, precisamente por eso, supo convocar a viajeros, cronistas, intelectuales y políticos de todo el mundo. La Unión Soviética hasta los años cincuenta, la República Popular China y la Cuba revolucionaria, fueron tres momentos del siglo veinte en los cuales la revolución dejó de ser la utopía soñada por muchos para convertirse en un modelo existente de sociedad cuyo modo de funcionamiento prometía la felicidad de todos sus integrantes. Por lo tanto, y desde la revolución rusa en adelante, las representaciones de la sociedad ideal abandonaron un imaginario tiempo futuro para convertirse en puro presente: bastaba con atravesar el océano o cruzar una frontera para presenciar ese futuro devenido presente y tocar con las manos un sueño realizado. Para los argentinos en particular, y los latinoamericanos en general, el camino abierto por Rusia parecía demostrar, como sostiene Ricardo Falcón, que la revolución también era posible en un país de capitalismo periférico, gobernado por una aristocracia secular y con la presencia dominante de campesinos pobres. En sus comienzos, la revolución rusa representó entonces un principio de transformación radical cuyo atractivo residía en sus proporciones épicas, en la juventud de sus dirigentes, y en el nacimiento de un nuevo orden que anunciaba el trastrocamiento de todos los lugares sociales. En los años treinta, para países no desarrollados como Argentina, la sociedad soviética continuaba resultando atractiva tanto por su racionalidad, planificación, industrialización, aplicación de la ciencia y la tecnología como también como modelo de sociedad, posibilidades de felicidad e igualdad social.