“Lucha social y representación: Tucumán 1966-1976”

ORQUERA, YOLANDA FABIOLA

Buenos Aires

Congreso; Congreso Internacional Transformaciones Culturales: debates de la Teoría, la Crítica y la Lingüística; 2006

<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:612.0pt 792.0pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:36.0pt; mso-footer-margin:36.0pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} --> En 1966 las luchas sociales surgidas en las paupérrimas condiciones laborales de los ingenios se rearticularon en torno a dos instituciones previamente existentes, la FOTIA (Federación de Obreros y Trabajadores de la Industria Azucarera) y el Consejo de Difusión Cultural, ente autárquico dedicado a favorecer las distintas formas de representación artística. En ese marco se gestó un campo cultural altamente politizado, en el que se distingue una corriente centrada en la conformación de una cultura local y otra dirigida a la representación de los sectores marginados y sus conflictos con el poder, considerando obras de Gerardo Vallejo, Pepe Núnez, José Augusto Moreno y Atahualpa Yupanqui, cuya obra resultó crucial en la conformación de la subjetividad del zafrero como “pobre”. Para contrarrestar la desarticulación forzada de dicha matriz productiva, iniciada por el “Operativo Independencia” (1975), me propongo reconsiderar sus implícitos teóricos y establecer un vínculo crítico con cuestiones actuales, tales como las de representación y subalternidad.