INVESTIGADORES
FREDERIC Sabina Andrea
congresos y reuniones científicas
Título:
Policiamiento de Proximidad y Segregación Social: estándares morales de las nuevas tecnologías humanas de seguridad
Autor/es:
FREDERIC SABINA
Reunión:
Conferencia; LASA; 2018
Resumen:
En el área metropolitana de Buenos Aires durante los últimos quince años, se duplicó el número de efectivos policiales y de fuerzas de seguridad, mientras proliferaban nuevas tecnologías humanas de la seguridad bajo la forma del policiamiento de ?proximidad?. Aquella forma de redistribuir la fuerza pública se convirtió en una política en expansión en Argentina; en Brasil con la creación de las Unidades de Policía de Pacificación justificadas en un modelo de ?policía comunitaria? (Menezes 2014) y en el mundo (Durao 2012). En todos los casos, se promovió la co-producción del patrullaje entre uniformados y vecinos, valorando la creciente aproximación del policía y el vecino, se moralizó así la seguridad como un servicio donado por el Estado. Dispositivos de patrullaje denunciados por académicos y organizaciones políticas y sociales de izquierda por la resecuritarización de las poblaciones condenables a la periferia social, o por la militarización de la seguridad, quedaron sin embargo marcados por el valor positivo del acercamiento entre policías y vecinos; aunque se incrementara desde su implementación un 20% la población carcelaria (2011-2015) . Quisiéramos poner de relieve en este artículo como estas nuevas tecnologías del control comprendidas bajo el estándar del policiamiento comunitario o de proximidad, generaron simultáneamente varios procesos. Por un lado, el despliegue masivo de uniformados distinguió: zonas tranquilas y peligrosas, incrementó las detenciones en la vía pública y la tasa de encarcelación; es decir reforzaron las fronteras del Estado con el otro interno (Galvani 2017). Muy distinto al panorama ofrecido por Jean Paul Brodeur (2011) respecto del mundo anglosajón donde el policiamiento de proximidad no se dirigió a luchar contra el crimen sino a reducir el miedo a través de la presencia policial y el uso de la palabra antes que la fuerza. En Argentina potenció la incriminación y la criminalización de mayor cantidad de ciudadanos. Por otro lado, esa alteración de trabajo policial paradójicamente generó vínculos de reconocimiento social entre ciertos referentes barriales y uniformados (Frederic 2014) Finalmente, impactó significativamente al interior de las instituciones de seguridad encargadas de la tarea, al desafiar el trabajo policial en nombre de esa moralización de la seguridad, generando rechazos, resistencias y adaptaciones a esta modalidad menoscabada por muchos gendarmes y policías. Fundamentalmente me ocuparé de estas últimas dos dimensiones del proceso para dar cuenta de las dificultades de sostener esta nueva tecnología de seguridad al convertir a gendarmes y policías en agentes politizados.