INVESTIGADORES
FRANZESE Juan Rafael
congresos y reuniones científicas
Título:
ANÁLISIS DE LA FRACTURACION EN EL ANTICLINAL DEL TINTÍN, VALLES CALCHAQUÍES, PROVINCIA DE SALTA
Autor/es:
MARIANO HERNÁNDEZ; FRANZESE, JUAN RAFAEL
Lugar:
San Juan
Reunión:
Simposio; XV Reunión de Tectónica; 2012
Institución organizadora:
ComTec - Asociación Geológica Argentina
Resumen:
El cerro Tintín (Figura 1) es uno de los varios anticlinales formados durante la etapa de inversión tectónica cenozoica de la cuenca de rift del Grupo Salta. Se encuentra ubicado en los Valles Calchaquíes, al este de la localidad de Cachi, Provincia de Salta, cercano al límite entre las provincias geológicas de Cordillera Oriental y Puna. Su largo es aproximadamente 13 km en dirección NNE-SSW y su ancho, en dirección E-W, varía entre 3,5 km en su parte sur y casi 2 km en su extremo norte. Posee un núcleo de metamorfitas de muy bajo grado (Formación Puncoviscana) sobre las cuales se apoyan las secuencias sedimentarias correspondientes a los grupos Salta (Cretácico-Paleógeno) y Payogastilla (Cenozoico). La presencia de discordancias en estos depósitos marca cambios tectónicos importantes en la historia evolutiva cenozoica de la región (Hongn et al., 2008). El pliegue es asimétrico, con vergencia occidental, doblemente buzante y sigue el rumbo de una falla inversa del basamento, de alto ángulo (falla del Tintín) que lo levanta por su vertiente occidental, eliminando casi por completo su flanco frontal (Figura 1). Como consecuencia del plegamiento, la secuencia sedimentaria involucrada sufrió una deformación frágil importante, en especial la Fm. Yacoraite del Grupo Salta. Esta formación es predominantemente carbonática y presenta fracturas de diversos estilos y orientaciones. Esta es una de las características que le confieren importancia en el desarrollo de hidrocarburos en los yacimientos más orientales de esta cuenca (Grosso et al., 2011). Con el objeto de analizar la configuración del sistema de fracturación y establecer su relación con la geometría y la cinemática del plegamiento se relevaron datos a lo largo de todo el flanco este del anticlinal del Tintín, en sus dos extremos de inmersión y en el sur del flanco oeste. Para ello se establecieron estaciones de medición en las cuales se registraron la orientación, longitud, espaciado, relleno, relaciones de corte entre fracturas, y otras características en la medida de la calidad del afloramiento. También se tomaron rumbo e inclinación de la capa y sus características sedimentarias. Los resultados de los análisis permitieron definir cuatro grupos con direcciones predominantes: E- W (N85 a N95), N-S (N355 a N10), NE-SW (N45 a N60) y NW-SE (N120 a N140), y en menor medida, direcciones intermedias a los grupos mencionados, como por ejemplo N20, N75, N155, entre otras. Se eligieron cuatro estaciones de medición representativas, dos en el flanco dorsal oriental del pliegue (E1 y E2), una en la posición cercana a la charnela en el extremo de inmersión sur (E3) y una en los afloramientos del flanco frontal occidental (E4; figura 1). La estación E1 está ubicada en una zona de cresta y la E2 en una posición de flanco inclinado (Figura 1). En la primera se registran las direcciones N-S, NE-SW y NW-SE. En la segunda se observaron las mismas direcciones, mas el grupo de dirección E-W. Este grupo, según las elaciones de corte, es posterior a los otros grupos, ya que termina en ellos y es siempre de menor longitud. En la estación E3 se registraron los grupos E-W y NE-SW. La dirección E-W es temporalmente posterior, como en la estación anterior. En la estación E4 se observan los grupos NE-SW y NW-SE, y las direcciones intermedias mencionadas (Figura 1). La fracturación de dirección E-W es interpretada como fracturas tensionales, formadas paralelas al sufrió varios eventos de deformación importantes durante el Cenozoico (Mon et al., 1995). La dirección N-S es interpretada como fracturas tensionales paralelas al eje de pliegue producto de la extensión generalizada que sufren la charnela y los flancos en su arco externo. Cabe destacar que estas fracturas solo aparecen en las estaciones E1 y E2, posiblemente porque en estas posiciones el pliegue se comporta de manera cilíndrica. En las otras estaciones esta dirección podría ausentarse debido a la falta de la condición cilíndrica, además de que imperan otros factores como, por ejemplo, la dirección de deslizamiento de las capas (Cosgrove et al., 2000). Las direcciones NE-SW y NW-SE se interpretan como fracturas de cizalla, con su ángulo agudo en dirección E-W y otras veces en dirección N-S. Las direcciones intermedias que aparecen en el flanco frontal se explican debido a la mayor rotación que sufre este limbo durante la evolución del pliegue, que conlleva una distribución de los esfuerzos de manera más compleja. Las fracturas en el anticlinal del Tintín están relacionadas al campo de esfuerzos regional y también asociadas a la evolución del pliegue (campo de esfuerzos local), resultando necesarias para acomodar la deformación del material involucrado. Los patrones de fracturas que se apartan de los modelos tradicionales son debidos principalmente al mecanismo de formación del pliegue, que en este caso se asocia al empuje ascendente del basamento a lo largo de la Falla Tintín.