INVESTIGADORES
FERNANDEZ Claudia Nelida
congresos y reuniones científicas
Título:
'Indignación' en Aristóteles: consideraciones acerca de su formulación y el aporte de la comedia griega antigua
Autor/es:
CLAUDIA N. FERNÁNDEZ
Lugar:
Lisboa
Reunión:
Congreso; III International Congress of Greek Philosophy; 2016
Institución organizadora:
Faculdade de Letras / Universidade de Lisboa
Resumen:
Desde que el estudio de las emociones en la Antigüedad se ha instaurado como un tema preferente y central, la Retórica de Aristóteles ha devenido el foco de atención privilegiado para esta mirada crítica. La razón es más que evidente: se trata del primer estudio sistemático sobre las emociones en el mundo antiguo y, por tanto, punto de referencia obligado para la discusión sobre la vida afectiva de los antiguos griegos. La propuesta aristotélica acerca de la denominación y alcance de las emociones ha sido objeto de análisis e interpretación en relación con su contexto retórico y persuasivo más próximo, dentro del marco más amplio de las doctrinas aristotélicas en general, y, además, puesta a prueba a la luz de otros testimonios y fuentes también antiguas, como las jurídicas y literarias.En esta última dirección, la denominación y definición de la emoción que Aristóteles llama "indignación" (tὸ nemesᾶn: un sentimiento doloroso producido por la percepción de una inmerecida prosperidad; cf. Retórica 1387a8-9) han recibido reparos por parte de la crítica, por considerar que el estagirita concibe en forma individual e independiente una emoción que, históricamente y de acuerdo con testimonios no filosofícos, estaba estrechamente vinculada y solapada con  phthónos ("envidia") (cf. D. Konstan, The Emotions of the Ancient Greeks: Studies in Aristotle and Greek Literature, 2016). Aristóteles podría estar reflejando más bien una distinción que se remontaba al período arcaico, ya desvanecida hacia el s. V y IV (cf. E. Sanders, Envy and Jealousy in Classical Athens: A Socio-Psychological Approach. Emotions of the Past, 2014).Nuestro aporte a la discusión se centra en la relevancia que tiene, a nuestro modo de ver, el sentimiento de la  indignación, tal como lo formula Aristóteles y diferente de la envidia, para explicar las percepciones y reacciones del héroe cómico en el momento de agenciar el cambio social que habitualmente ejecuta. La atribución del sentimiento de la indignación a la catarsis cómica no es algo nuevo: L. Golden (Aristotle on Tragic and Comic Mimesis, 1992) entre los primeros y, recientemente, D. Rosenbloom ("Athenian drama and democratic political culture", 2012), han defendido esta tesis, sobre todo en vistas a que la indignación es, en términos aristotélicos, el reverso de la piedad, la emoción trágica por excelencia. Nuestro trabajo, sin embargo, parte de premisas diferentes. Centrándonos en la narrativa cómica -y no en el público de comedia- encontramos expresado -en Plutos explícitamente y en Caballeros implícitamente- el escenario cognitivo que Aristóteles suscribe como libreto básico para que surja la indignación. Sin duda es una emoción que comparte el héroe con el público, pero no direccionada hacia su figura -como cuando el espectador siente piedad por el héroe trágico-, sino hacia adversarios comunes; nacida de un sentimiento de impotencia, la indignación penetra la esfera pública como un motor de acción y reclamo social.A partir del análisis de aquellos pasajes en que Aristóteles relaciona indignación con envidia (Retórica 1387b23) y emulación (Retórica 1388a32-3), concluimos con la defensa y pertinencia de su disociación para explicar tanto las condiciones bajo las cuales las emociones del héroe de comedia ocurren como las respuestas que ellas generan.