INVESTIGADORES
FERNANDEZ Claudia Nelida
congresos y reuniones científicas
Título:
Insensatez y sentimientos: la obsesión emocional (en Antífanes, a partir de Aristófanes)
Autor/es:
CLAUDIA N. FERNÁNDEZ
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Workshop; Workshop PICT "Pasiones (com)partidas: las emociones en los fragmentos de tragedia, comedia y drama satírico de la Atenas del s. V a.c."; 2023
Institución organizadora:
Universidad Nacional de La Plata /Universidad de Buenos Aires
Resumen:
El personaje de Filocleón (protagonista de Avispas de Aristófanes, 422 a.C.) resulta un importante precedente para un tipo de personaje recurrente en la comedia media y nueva, el emocional obsesivo, que se caracteriza por estar dominado por un sentimiento absorbente que orienta su voluntad y dicta su comportamiento. Filocleón, en efecto, se ve afectado por una inclinación compulsiva e incontrolable por participar en los tribunales y condenar a los enjuiciados, y la comedia le otorga un nombre a su inclinación excepcional, cuando lo denomina φιληλιαστής (V. 88), es decir, "apasionado por servir como juez". Se trata de un afecto ‘enfermizo’ -también se cataloga de nόsos y manía su disposición mental-, que invalida cualquier atisbo de racionalidad: el heliasta no logra ser persuadido del engaño en el que se encuentra sumergido, porque la excentricidad de sus sentimientos desconoce cualquier discurrir racional. Su caso, además, se ve agravado porque él es también un philokleón ("apasionado por Cleón"), lo que explica su fe inquebrantable en el liderazgo político de los demagogos a los que apoya incondicionalmente.Esta philía excesiva -como la describe Robson (2013)- parece estar también en la base de la factura de muchos de los personajes de comedia media, que se encuentran inmersos en fijaciones emocionales hacia objetos de disímil valor, como, entre otros, la superstición, el dinero, ο la humanidad toda. Un autor de comedia media como Antífanes nos servirá de ejemplo, en razón de que, en su prolífica producción, habría ahondado en este tipo de ‘personalidades’ compulsivas, con la intencionalidad, además, de apuntar a su flaqueza moral (Konstantakos, 2022). De los numerosos títulos que nos han llegado de sus comedias, observamos que el sentimiento de la philía, como prefijo, forma parte del nombre de varios de los personajes que dan títulos a sus obras: Φιλέταιρος (214 KA) ("Apasionado por sus compañeros"); Φιλοθήβαιος (frr. 216-217 KA) ("Apasionado por Tebas"), Φιλομήτωρ (219 KA) ("Apasionado por su madre"), Φιλοπάτωρ (220 KA) ("Apasionado por su padre") (ed. Olson, 2021). Sabemos que otros tantos personajes igualmente temperamentales y sentimentalmente excéntricos formaban parte de sus obras, de los cuales se preservan algunas alusiones, como las arriba mencionadas, que dan cuenta de su desviación afectiva.La contraparte de estos ‘enamorados’ la constituyen los "aborrecedores", también desbordados por su pasión, para los cuales el odio (μῖσος) provee un nombre para signar su conducta repulsiva. La figura paradigmática de este grupo la constituye el misántropo, un tipo cómico que, desde el Μονότροπος ("Solitario") de Frínico, se ha multiplicado en el género, para consagrase en Cnemón, el protagonista de El díscolo de Menandro. Antífanes también tiene su misántropo, en la comedia titulada Μισοπόνηρος ("Aborrecedor de los perversos") (f. 157 KA), de la que ha sobrevivido un breve pero interesante fragmento. Sobre este pasaje de Antífanes, y los otros que se han conservado, reflexionaremos en este trabajo, que pretende echar luz acerca de cómo ciertos modos de sentir compulsivos pueden resultar especialmente cómicos.Partimos de la hipótesis de que el 'obsesivo sentimental' ha sido un tipo cómico perdurable en su tránsito desde la arkhaía hasta la néa, aunque con matices significativos, en razón, sobre todo, del objeto de su atención. En la disfunción emocional del personaje, en su automatismo y rigidez pasional, en su mala gestión de los afectos, se encuentra la clave de por qué resulta un espécimen predilecto del género cómico