CEUR   20898
CENTRO DE ESTUDIOS URBANOS Y REGIONALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
La política de gestión territorial en espacios urbanos periféricos de la ciudad de Córdoba: prácticas estatales y disputas de representaciones
Autor/es:
GAMBOA, MARIANA; MORILLO, ERNESTO; BALCAZAR, FANI; ELORZA, ANA LAURA; ALVARADO RODRIGUEZ, MONICA
Lugar:
La Plata
Reunión:
Jornada; XI Jornadas de Investigación, Docencia, Extensión y ejercicio profesional. Disputas por el Estado, la democracia y las políticas públicas; 2019
Resumen:
Lefebvre (1968) plantea que un modo deproducción organiza, produce su espacio y su tiempo, al igual que produceciertas relaciones sociales; el modo de producción proyecta en el terreno esasrelaciones, lo cual tiene una retroacción sobre ellos. Según este autor, laproducción del espacio es resultante de tres momentos que seencuentran interconectados: 1) prácticas espaciales; 2) representacionesdel espacio; y 3) espacios de representación. Las prácticas espaciales son las formas en que los distintosagentes generan, utilizan y perciben el espacio; las representaciones del espacio se refieren a los espaciosconcebidos y derivados de una lógica particular y de saberes técnicos yracionales; y los espacios derepresentación son los espacios vividos que representan formas de conocimientoslocales y menos formales; son dinámicos, simbólicos, y saturados consignificados, construidos y modificados en el transcurso del tiempo por losagentes. En este sentido, podemos comprender la producción del espacio urbanocomo un proceso atravesado por disputas y conflictos entre los diferentesagentes (estado, organizaciones socio territoriales, empresas, etc.) conlógicas, intereses y poderes diferentes, a partir de los cuales se producenterritorios con prácticas espaciales (en materialidades, usos, normativas,planeamiento) que se encuentran en tensión.Desde este equipo venimos trabajandosobre los procesos de producción social del territorio y hábitat llevados acabo por las organizaciones socioterritoriales[1];en los cuales los sujetos de manera colectiva disputan territorios y un ?lugar?en la ciudad, el plano geográfico, material pero también en el simbólico. Lalucha por un lugar en la ciudad trasciende la idea de vivienda, implica elacceso a una multiplicidad de servicios (agua, luz, recolección de residuos,etc.) y recursos. Esta dimensión pública de la reproducción cotidiana hace quelos sujetos vinculados a un mismo territorio construyen procesos organizativosy estrategias propias que implican enfrentamientos, demandas, conflictos negociacionesy alianza con diferentes actores, entre ellos el Estado, los actores delmercado inmobiliario o propietarios privados de la tierra, las empresasproveedoras de servicios. En esos procesos organizativos también se producentensiones internas, entre las necesidades familiares/individuales y aquellasque se definen y sienten como necesidades colectivas. El modo en que laorganización (formal o informal) logra construir un horizonte común, unaestrategia de lucha, y los sentidos y prácticas que allí se anudan, seráncentrales en la conquista de la tierra y aquello que se define como básico parala vida cotidiana (Elorza, Morillo, Gamboa, Torriglia y Diaz Marengo, 2017).En el presente proyecto, nos interesa avanzar en reconocerlas prácticas, relaciones y representaciones sobre el espacio urbano dedistintos actores estatales a través de sus políticas públicas, en especial,las políticas focalizadas territorialmente, que se caracterizan por definiráreas de la ciudad por caracterizarse por conformarse como enclaves de pobrezay de conflicto urbano, pero que a la vez son espacios de representación, entérminos de Lefevbre (1968), es decir, espacios de vida de familias y deorganizaciones sociales que desarrollan estrategias colectivas a través de lascuales disputan recursos materiales y simbólicos en la producción de eseespacio. En el marco de las reconfiguraciones neoliberales de las últimas décadas-en el plano económico pero también en el tecnológico, cultural y político-puestas en marcha para responder a la necesidad de una organizaciónsocioespacial estable, que garantice las condiciones más adecuadas para eldespliegue de la dinámica capitalista en los territorios (Harvey, 2014), lasciudades continúan siendo los lugares estratégicamente centrales para laconstitución de tales proyectos, pero también, en donde se da su reiteradofracaso y en donde surgen resistencias (Nik, Peck, Brenner; 2009) que sonvistas desde los gobiernos como desórdenes que deben  controlarse y/o administrarse mediante elejercicio de los poderes estatales.En las periferias urbanas, donde se encuentran mayormente ubicados losasentamientos producidos de manera informal por los sectores populares, y enlos lugares céntricos codiciados por su localización estratégica, emergen organizacionesy movimientos sociales que amplían el espacio urbano disputando su definición ala vez que su lucha es por las condiciones de reproducción como requisito de lapropia condición urbana (Gago y Quiroga, 2018). Estos actores urbanos renuevanconstantemente las reivindicaciones asociadas a la cuestión del acceso a latierra, la regularización de las ocupaciones, las condiciones de hábitat, elacceso a servicios, el uso del espacio público, la inseguridad, la represiónpolicial a jóvenes de barrios populares, etc. En la ciudad de Córdoba durante las últimas dos décadas, el proceso deconfiguración urbana estuvo caracterizado por un sostenido aumento del valor delos terrenos, escasez de tierra con servicios al alcance de las familias debajos ingresos y la ejecución de políticas públicas habitacionalesrestringidas, lo cual derivó en un incremento de las situaciones deautoproducción del hábitat (Elorza y Morillo, 2017). La localizaciónresidencial de la población de los sectores populares, ya sea a través de lapolítica pública habitacional o de los nuevos asentamientos producidos desdeestrategias colectivas de acceso al hábitat, se ha producido en zonasperiféricas de la ciudad históricamente caracterizadas por un déficit encalidad de los recursos urbanos, lo cual se traduce en menores oportunidadespara el acceso a servicios y equipamientos sociales (educativos, culturales,recreativos, etc.). Paralelamente, estos sectores de la ciudad han sidoidentificados por las agencias estatales como las áreas más inseguras y conmayor vulnerabilidad, donde además la presencia del narcotráfico se ha venidoconsolidando.En estecontexto, comienza a configurarse en la agenda pública y política el problemade la inseguridad desde una concepción de seguridad ciudadana con unaperspectiva territorializada, asumiendo una correlación entre áreas donde reside la población encondiciones de pobreza con mayor inseguridad e índices de criminalidad.  En diciembre de 2015 el gobierno de laprovincia lanza el Plan Integral de Seguridad Ciudadana y Prevención del delito?Córdoba se encuentra?, el cual tiene como objetivo abordar de manera integralel tema de la seguridad a partir de dos ejes centrales: la modernización de lainstitución policial y la transformación urbana con el apoyo de programas dedesarrollo social, con fuertes reminiscencias a la perspectiva del ?urbanismosocial? popularizado y difundido desde los planes urbanos de la ciudad deMedellín, Colombia. En esta ponencia analizamos el Plan Provincial de GestiónTerritorial por Cuadrantes, contemplado en la Ley Provincial 10437 PlanIntegral de Seguridad Ciudadana y Prevención del Delito, estrategia que implicauna organización y división del territorio de la ciudad según cuadrantes, en elque se estableció un código de semáforo en función a tres variables (deserciónescolar, reincidencia en la cárcel y desempleo) que determinan el nivel devulnerabilidad del sector. Como resultado de esta metodología se identificaron119 cuadrantes, 41 rojos, 35 amarillos y 43 verdes, siendo los rojos losprioritarios para intervenir y generar estrategias para la producción de unhábitat seguro. Se plantea como un planparticipativo, ya que a partir de la identificación de cuadrantes deintervención  se podrán estableceracciones acordes a cada territorio para asignar los recursos necesarios paralas diversas problemáticas delictuales y de convivencia a partir de losacuerdos del Consejo Barrial[2]. Los interrogantes que guían este trabajoson: ¿qué prácticas y representaciones del espacio se proponen desde laspolíticas? ¿qué disputas y tensiones emergen desde las organizaciones socialesen relación a estas políticas públicas? ¿qué relaciones se establecen entre lasorganizaciones socioterritoriales y los agentes estatales?La metodología definida es de tipocualitativa, a partir del análisis e interpretación de la política pública Plan Provincial de Gestión Territorial porCuadrantes de fuentes secundarias (informes oficiales, análisis de artículosde la prensa gráfica local, artículos de investigación, etc.) y entrevistas afuncionarios y profesionales del organismo del gobierno que ejecuta estapolítica para reconocer las representaciones y las practicas del espacio urbanodesde el estado y su implementación en la ciudad de Córdoba.[1]En el periodo 2016-2017desarrollamos el proyecto ?LAS PRÁCTICAS, REPRESENTACIONES Y SENTIDOS SOBRE ELTERRITORIO EN PROCESOS DE PRODUCCIÓN SOCIAL DEL HÁBITAT. ESTUDIO DE CASO?, enel cual participamos varios integrantes del equipo de este proyecto.Actualmente, estamos llevando a cabo el proyecto titulado: Espacio urbano, policías públicasfocalizadas y organizaciones socioterritoriales[1]  en la ciudad de Córdoba, con financiamientode Secyt- UNC. [2]Información extraída de declaraciones del ministro