Poblaciones caninas asilvestradas: impacto en la producción pecuaria de Tierra del Fuego, Argentina

ZANINI F, LEIVA D, CABEZA S, ELISSONDO C, OLMEDO E, PÉREZ H.

Vinze DG

Lugar: Río Grande, Tierra del Fuego, Argentina; Año: 2008 p. 27

978-987-05-4709-9

En la provincia de Tierra del Fuego, los ataques perpetrados por perros a los ovinos datan de más de 40 años, aunque el problema comenzó a agravarse con el crecimiento explosivo y desordenado de las ciudades (Río Grande, Ushuaia y Tolhuin) a partir de la década del ´80. Desde entonces, cientos de perros deambulan por las calles sin control impactando en la salud de las personas, el medio ambiente, los animales de producción y la fauna autóctona. A través de una encuesta semicerrada se estimó el impacto ocasionado por los perros en la producción pecuaria de la provincia durante el período mayo 2006 - febrero 2008. La misma se realizó en forma personal abarcando al 79,2% de los establecimientos rurales. Se reportó presencia de perros en 42 establecimientos (73,7%), de los cuales 34 (81%) sufrieron algún tipo de perjuicio por esta causa, siendo la muerte de ovinos el más importante, involucrando más de la mitad (52,7%) de la superficie provincial dedicada a la producción. Más de la mitad (59,5%) declaró que las incursiones fueron perpetradas por perros asilvestrados y domésticos, dominando los de tamaño grande (92,9%). La falta de control en las ciudades y el abandono en los caminos se indicó como la principal causa de la presencia de perros en el campo. En total se perdieron 32.725 cabezas ovinas (15.933 corderos, 794 carneros, 13530 ovejas y 2468 borregos/as) y 77.566 kilogramos de lana (2,1% de la producción total). Las pérdidas bovinas incluyeron 32 terneros y 2 novillos. Las pérdidas contabilizaron $ 4.450.375,6 y significaron para los establecimientos rurales 13,7% del ingreso total y 30,8% del ingreso neto. Los más afectados fueron aquellos establecimientos cercanos a la ciudad de Río Grande y la Comuna de Tolhuin, que concentraron el 27% y 39% de las pérdidas totales respectivamente. Esta asociación permitió inferir que el descontrol de la población canina en las ciudades ha sido el origen del problema. Las pérdidas producidas por los perros afectan sustancialmente la economía pecuaria provincial. La perpetuidad del problema, deteriora la producción de carne y lana, el progreso genético obtenido durante años, la calidad de vida de las personas, e impide el aprovechamiento económico de miles de hectáreas. Por lo tanto, y antes de que este problema se torne irreversible, se impone la puesta en marcha de acciones integrales tendientes a controlar la población canina responsable de los daños descriptos.