Agentes biológicos que aceleran la decadencia y muerte de plantas acuáticas

POI DE NEIFF, A.S.G.; CASCO, S.L.

Maringá (Brasil)

Workshop; Workshop Ecología y Manejo de Macrófitas Acuáticas; 2000

  Las plantas acuáticas y los organismos fitófagos han sido estudiados generalmente como compartimentos poco relacionados, con énfasis en su distribución y abundancia. Las praderas de vegetación acuática fueron estudiadas por su capacidad de generar biomasa y de acumular y transferir nutrientes, Muchos estudios de producción de macrófitos no han considerado el efecto de las poblaciones de invertebrados fitófagos si bien, raramente, las plantas crecen libres de herbivoría. En pirámides tróficas de lagos de la planicie Bajo Paraná, la proporción de energía transferida desde las plantas a los organismos fitófagos es siempre baja, generalmente menor que el 1% y el consumo de tejidos verdes no supera al 5% de la biomasa total. Sin embargo, la actividad de los fitófagos (formas inmaduras y/o adultos) produce importantes daños en áreas vitales de las plantas, que aceleran su decaimiento estacional. en la planicie del río Paraná en las cercanías de su confluencia con el río Paraguay la mayoría de los lagos están dominados por Eichhornia crassipes, la cual cubre entre el 30 y el 100% de la superficie del agua. La biomasa de las plantas aumenta desde agosto hasta marzo y declina hasta un 50 % de su máximo anual durante la estación fría. Neochetina bruchi y Neochetina eichhorniae (Coleoptera, Curculionidae) forman consorcios de alta especificidad con Eichhornia crassipes y alcanzan su máxima densidad de población (120 individuos por m-2) en otoño. En este período los adultos efectúan 130 huecos por lámina foliar, en promedio, al alimentarse. El número de hojas atacadas es elevado todo el año, resultando afectadas 81 a 98% del número total de hojas. Las larvas de Thrypticus sp. También atacan a E. crassipes, pero afectan la base del pecíolo hasta una longitud inferior al 14% de la longitud total de la hoja. ElL porcentaje promedio de pecíolos atacados oscila entre 4 y 59% dependiendo del sitio de muestreo y de la época del año. En la margen izquierda del río Paraná, a la misma latitud, el crecimiento de E. crassipes es, raro en cambio alcanzan un mayor desarrollo las praderas de plantas sumergidas y las plantas arraigadas emergentes. Éstas resultan atacadas por diversas especies de Curculionidae y por larvas de lepidópteros. En este trabajo se discuten las principales variables que condicionan la abundancia de los fitófagos y por lo tanto el grado de ataque a las plantas.