INVESTIGADORES
LYTHGOE Esteban
congresos y reuniones científicas
Título:
Paul Ricoeur, pensador del testimonio
Autor/es:
ESTEBAN LYTHGOE
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Jornada; XXII Encuentro Nacional de Fenomenología; 2011
Institución organizadora:
Academia Nacional de Ciencia
Resumen:
La Memoria, la historia y el olvido puede ser leído como un libro fundamentalmente de filosofía teórica, que comienza con una fenomenología de la memoria, continúa con una epistemología de la historia y ambas quedan articuladas por una ontología de la condición histórica. Desde esta perspectiva, se haría una lectura epistemologizante de la tesis de que “…el testimonio constituye la estructura fundamental de transición entre la memoria y la historia.” , alineando así a Ricoeur dentro de la larga tradición iniciada por David Hume. No faltan elementos para avalar esta posición. Este concepto es desarrollado en la segunda parte dedicada a la epistemología de la historia. Allí se explica el modo en que el testimonio se convierte en evidencia histórica, que podrá ser utilizada en investigaciones históricas posteriores. Una lectura se encontraría incluso en condiciones de subsumir la dimensión ética presente en la atestación dentro de la problemática epistemológica. Este concepto, definitorio del testimonio y ligado a la oposición fiabilidad – sospecha, es, al fin y al cabo, un cierto tipo de creencia o un modo aléthico alternativo al de la verdad por corresponden-cia. El Holocausto, empero, ha obligado a modificar el vínculo entre la historia y el tes-timonio. La Ilustración logró separar la historia sacra de la laica rechazando como evidencia empírica el testimonio de los milagros, arguyendo que sólo podían ser aceptados testimonios consistentes con la experiencia habitual. Los horrores padecidos por los sobrevivientes del Holocausto exceden la comprensión y la experiencia media de la población, por lo que, de haberse continuado con este criterio, se deberían haber rechazado sus declaraciones. “Se trataba de luchar contra la credulidad y la impostura; se trata ahora de luchar contra la incredulidad y la voluntad de olvidar.” De lo que se trata, entonces, es qué hacer con este tipo de testimonios, ¿se lo debe tomar como evidencia fáctica en su totalidad? ¿Se debe tomar sólo los elementos fácticamente contrastables, eliminando los demás? Pese a que La Memoria, la historia y el olvido responde a todas estas preguntas, ellas se desdibujan detrás de otras consideraciones, en particular el debate en torno a la relación historia y memoria. El objetivo del presente artículo poner destacar todas estas consideraciones pues po-nen de manifiesto el modo en que el filósofo concibe la relación entre ética e historia. La fundamentación de esta posición debe rastrearse, empero, a los estudios sobre el testimonio en Levinas, Heidegger y Nabert realizados en el transcurso de treinta años. Nuestra hipóte-sis es que en su penúltima obra Ricoeur mantiene su cercanía a J. Nabert y distanciado de Heidegger y Levinas.