Espacios persistentes: arte rupestre, tecnología lítica y barniz de las rocas.

ADRIS, SILVINA Y CAROLINA SOMONTE

La Rioja

Congreso; XVIII Congreso Nacional de Arqueología Argentina; 2013

Las ocupaciones humanas de cierta recurrencia y profundidad temporal, manifestadas en el registro arqueológico de superficie, pueden ser vistas como el solapamiento de varios paisajes, conocidos como palimpsestos. Estos palimpsestos han sido interpretados en Amaicha del Valle como espacios persistentes, en base a las características tecnológicas de diversos conjuntos líticos, las evidencias de reclamación artefactual en dichos conjuntos, sumado a las dataciones mediante VML efectuadas sobre el barniz de las rocas que recubre a algunos de estos artefactos. Estos espacios persistentes fueron fuertemente asociados al uso de los mismos como canteras de aprovisionamiento y taller lítico, así como a la explotación de un recurso particular: el algarrobo.     En este trabajo se pretende profundizar y discutir los términos de la persistencia ocupacional de estos espacios a partir del análisis de dos aspectos del registro arqueológico que no han sido tenidos en cuenta con anterioridad: los contextos de producción y significación del arte rupestre y la integridad de los conjuntos líticos.   Los espacios persistentes que forman parte de esta presentación se localizan en el valle de Santa María, específicamente en el sector distal de la vertiente occidental de Cumbres Calchaquíes: Planchada La Puntilla, Río Las Salinas 1 y Río Las Salinas 2. Estos espacios se caracterizan por presentar un registro de superficie con evidencia de diversas historias ocupacionales; superposición de las mismas; ausencia -hasta el momento- de materiales orgánicos datables mediante técnicas convencionales; presencia de barniz de las rocas afectando artefactos, al arte rupestre y a diversas estructuras, e indicios de procesos de reclamación arquitectónica y artefactual, así como de diferentes momentos de ejecución en las representaciones rupestres.   En función de esta problemática se efectuaron los primeros registros y análisis de las representaciones rupestres para el área, así como la obtención de dataciones sobre las pátinas que forman parte de los grabados de algunos motivos. Asimismo, se efectuó la recolección de nuevas muestras de artefactos líticos para dataciones y análisis funcionales de sus filos. Específicamente para el barniz de las rocas se tuvieron en cuenta, tanto para el caso del arte rupestre como para los artefactos líticos, variables como color, intensidad, tipo de exposición y posición en el terreno. El objetivo de esto fue obtener  información relevante sobre ciertos factores de los que depende el desarrollo del barniz. Esto permitió agrupar conjuntos para el arte rupestre, por un lado, y los artefactos líticos por el otro, en base al grado de desarrollo del barniz.      Los resultados de los análisis permiten sostener que: 1) los espacios persistentes en este sector de la quebrada de Amaicha forman parte de un paisaje, resultado de prolongados procesos de ocupación y reocupación, que parecerían ser dependientes de la presencia de ítems culturales y recursos naturales y; 2) existen diversos momentos en el uso de estos espacios persistentes, expresados claramente desde el arte rupestre, la tecnología lítica y las dataciones mediante VML.